La Línea

El nuevo reglamento del cementerio prohíbe los toldos en los nichos

  • La normativa recoge la obligación de que las lápidas de una crujía sean del mismo color

Una mujer coloca flores con dos nichos con toldos al fondo.

Una mujer coloca flores con dos nichos con toldos al fondo. / a. c.

El cementerio de San José cuenta con un nuevo reglamento tras haber sido publicado en el Boletín Oficial de la Provincia de Cádiz. Fue aprobado por el Pleno el pasado 6 de octubre y ya está en vigor después de haber superado todos los trámites pertinentes. El objetivo de que el camposanto tenga una nueva normativa reguladora obedece a la intención del equipo de gobierno de que se cuide y preserve el lugar. Entre las medidas que deberán adoptar los titulares de los nichos destaca un punto que prohíbe la instalaciones de toldos, parasoles u otro tipo de elementos.

El reglamento contempla que todo el material que se utilice en las lápidas debe ser de mármol, piedra de granito u otros materiales nobles. Además debe ser del color del resto de las lápidas si crujía ya tiene homogeneidad cromática. Está prohibido instalar toldos, persianas, parasoles, barandillas, verjas, rejas y demás elementos que dificulten el normal desarrollo de los trabajos que se realizan en el cementerio. Sí se permiten como elementos accesorios floreros, cruces o esculturas de reducidas dimensiones, pero deberán estar correctamente anclados a las lápidas con pernos o tornillos para garantizar su perfecta sujeción.

Para continuar con la referida homogeneidad, cualquier elemento recordatorio gráfico a color no podrá tener más de un sexto del total de la superficie de la lápida. Del mismo modo las esculturas, cruces y otros elementos adicionados no podrán exceder en sus dimensiones un cuarto del total de la lápida.

En caso de que se realiza alguna exhumación, las lápidas, losas, cruces y demás objetos se podrán con la preceptiva licencia municipal. En el caso de que algunos de estos elementos tengan un significado valor histórico o artístico revertirán al Ayuntamiento al finalizar la concesión, y sólo podrán retirarse para ser restaurados.

El espacio libre en las calles del camposanto también está regulado con este nuevo reglamento, que prohíbe que se invada mediante cualquier elemento, construcción o instalación los espacios entre nichos y los testeros laterales de las crujías. Tampoco se permite para las nuevas sepulturas en nichos la ocupación de parte del acerado con escalones, altares o cualquier otro elemento.

Los mensajes ofensivos también están contemplados en esta normativa, que no autoriza epitafios, recordatorios, emblemas y símbolos que contengan una burla o ataquen a las creencias religiosas o que, en general, sean atentatorias contra la dignidad de las personas.

El reglamento recoge la obligatoriedad de que los titulares o personas allegadas adecenten y cuiden las lápidas, losas, cruces, panteones y cualquier otro elemento accesorio, que deben mantenerse en perfecto estado de decoro y limpieza. La normativa señala que la colocación de cualquier elemento fúnebre deberá contar con la autorización municipal, y que las empresas que coloquen lápidas o cualquier elemento serán las responsables de los daños ocasionados en la ejecución de estos trabajos, por lo que deben contar con un seguro de responsabilidad civil.

Por otra parte operarios de la delegación de Cementerio acometen durante estos días trabajos de limpieza en todas las cubiertas de las crujías, a la vez que la concejalía evalúa la ejecución de obras de rehabilitación, ya que se encuentran bastante deterioradas. La intención es que el inicio de los trabajos no se demoren mucho tiempo. El Ayuntamiento también tiene previsto construir una nueva crujía de nichos en el patio este.

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