El litoral de La Línea contó con el servicio de vigilancia y socorrismo ayer por primera vez en todo después de que la contratación de una empresa que se hiciera cargo de esta tarea.

Los linenses pudieron disfrutar por primera vez de un baño y de sus playas sin temer que algo pudiera ocurrir y que no hubiera socorristas para sacar a alguien del agua o efectuar curas si fuera necesario. Sin embargo la presencia de los vigilantes no se encuentra en todo el litoral, ya que las playas de Torrenueva y el Burgo carecen de socorristas. El concejal de Playas, Julio Sánchez, confirmó que existen dos puestos de socorrismo en la zona del Conchal, uno en Poniente, uno en La Alcaidesa y uno en Sobrevela.

La empresa Medios Acuáticos S.L. será la que hasta mediados de septiembre vele por la seguridad en las playas de La Línea y para ellos dispondrá de 25 socorristas, un coordinador, un operador de radio, dos conductores de embarcaciones, un enfermero, además de asesoramiento médico las 24 horas, un conductor de ambulancias, una ambulancia, dos quads y dos motos acuáticas o embarcaciones. También hay una moto acuática de retén que estará todo el día disponible a menos de una hora como sustitución en caso de avería.

El Ayuntamiento pagará a esta empresa 308.000 euros por realizar este servicio, una cantidad menor que la que el año pasado se abonó a la Cruz Roja, que rondó los 350.000 euros.

El PSOE ha expresado sus quejas porque los medios materiales y humanos son menores que los aportados por la organización en años anteriores para realizar el servicio de vigilancia pero Sánchez ha negado que la diferencia en el número de personal sea excesiva y ha destacado que la playa de Santa Bárbara está cerrada al baño a causa de las obras de la remodelación del paseo marítimo que está llevando a cabo la Demarcación de Costas.

Por su parte, la Cruz Roja destacó que su dispositivo contaba con 50 personas y más medios materiales y además criticó al concejal de Playas que aseguró que la organización había pedido 480.000 euros para hacer el servicio este año, negándolo rotundamente y señalando que el precio habría rondado el del año pasado.

El Ayuntamiento se vio obligado a sacar a concesión el servicio después de que no llegara a un acuerdo con la Cruz Roja para hacer las playas este verano a causa de la deuda que mantiene el Consistorio con la organización que roza los 200.000 euros. Cruz Roja siempre mantuvo que no haría el servicio si el equipo de gobierno no le pagaba la deuda o al menos una parte importante pero no fue así. Entonces, el Ayuntamiento sacó a concurso el servicio pero ninguna empresa se presentó por lo que tuvo que abrirse procedimiento negociado para buscar una mercantil que quisiera afrontar la tarea.

El alcalde, Juan Carlos Juárez, dijo que el 1 de julio estarían los socorristas en las playas de La Línea pero finalmente han estado presentes cinco días más tarde y ya iniciada la temporada de playas que se retrasó del día 10 al 20 de junio precisamente por los problemas suscitados para realizar el servicio.