Las hermandades pasearon ayer en Vía Crucis en el interior del santuario de la Inmaculada Concepción, debido a las fuertes lluvias que azotaron durante la tarde la ciudad de La Línea, lo que provocó que se cambiaran los planes del Consejo Local de Hermandades y Cofradías.

En el programa de Cuaresma de 2008 estaba previsto que el cortejo del Cristo de la Flagelación saliera sobre las ocho y cuarto hacia el santuario de la Inmaculada, donde se iniciaría el Vía crucis sobre las nueve. En cambio, el Consejo Local de Hermandades, dirigido por Juan García Medina, tomó la decisión horas antes de que la imagen no saliera por el peligro que pudiera correr en la calle, y que el Vía Crucis se celebrara a las nueve de la noche dentro del céntrico templo linense.

En el acto, hubo representación de todas las hermandades, incluidas las de gloria. Las catorce estaciones del Vía Crucis, reflejadas en otros tantos cuadros que estaban distribuidos por los muros de la iglesia, fueron recorridas por la imagen del Santísimo Cristo de la Paz, portado por tres jóvenes y flanqueado por dos cirios.

Representantes de cada cofradía linense se encargaron de leer las estaciones. El párroco de la Inmaculada Concepción, Juan Valenzuela, condujo los rezos, aunque también estuvieron presentes los de San Pedro, Juan Enrique Sánchez, y de San Pío, Ignacio Fernández Navarrete.

En cuanto al resto de actividades cofrades del día, celebradas con motivo de la Cuaresma, están los cultos en sus respectivos templos de la Oración en el Huerto, Entrada Triunfal y Soledad. Por otro lado, continúa abierta la exposición de enseres cofrades en el Museo del Istmo. Mañana, la cuadrilla de costaleros del Gran Poder dará un concierto a la una y media en la Inmaculada a cargo de la agrupación musical del Santísimo Cristo de la Humildad y Paciencia de San Fernando.