La concejalía de Servicios Sociales del Ayuntamiento recibió durante 2007 un total de 696 solicitudes para las ayudas que el Gobierno ofrece a los ciudadanos que tienen algún tipo de discapacidad a través de la Ley de Autonomía Personal y Atención a Personas en Situación de Dependencia.

La responsable de este departamento municipal, Inmaculada Olivero, indicó ayer que desde que comenzara el plazo para solicitar las ayudas en mayo de 2007, la Junta de Andalucía ha realizado 124 valoraciones en la ciudad, de las que el 80 por ciento, 97 casos, resultaron aptos para acogerse a un Programa Individualizado de Atención (PIA) como grandes dependientes.

De hecho, sólo se estudiaron los casos de la categoría más grave, ya que estaba previsto que sólo éstos tuvieran derecho a prestaciones durante 2007.

Un PIA es un esquema de las modalidades de intervención más adecuadas a la persona dependiente, en función de los recursos previstos en la resolución para su grado y nivel de dependencia. La persona declarada en situación de dependencia o, en su caso, sus familias o representantes legales serán consultados previamente a la aprobación del programa.

En el catálogo de servicios de la Ley de Autonomía Personal aparecen como servicios: la prevención de las situaciones de dependencia y los de promoción de la autonomía personal, la teleasistencia, la ayuda a domicilio, centros de día y de noche y la atención residencial. Servicios que, según sus necesidades, disfrutarán los linenses declarados como gran dependientes según las valoraciones de la Junta.

Como se recoge en la Ley, el grado III, o gran dependencia, "se considera cuando la persona necesita ayuda para realizar varias actividades básicas varias veces al día y por la pérdida total de su autonomía física, mental, intelectual o sensorial, necesita el apoyo indispensable de otra persona o tiene necesidades de apoyo generalizado para su autonomía".