El Gobierno de Gibraltar ha pedido a los pescadores y propietarios de embarcaciones que alerten de la presencia "ilegal" de la Guardia Civil u otra autoridad española en las aguas que rodean al Peñón.

El Ejecutivo de Peter Caruana les ha advertido de que deben "rechazar cualquier petición de las autoridades españolas, ya sea para abordar embarcaciones, requerir documentación, hacer preguntas o para cualquier actuación relacionada con el cumplimiento de la legislación, sobre todo en materia de pesca y medio ambiente". Ha solicitado que las embarcaciones que sean abordadas avisen a la Policía de Gibraltar o que coloquen una bandera de auxilio.

Por su parte, el Ministerio español de Exteriores afirmó que seguirá trabajando para "profundizar" en la colaboración con Gibraltar en el Foro de Diálogo, "a pesar de la actitud de Peter Caruana". Un portavoz indicó que se seguirá trabajando "con espíritu constructivo".

El senador del PSOE José Carracao lamentó que Caruana, "no tenga la valentía de pactar un acuerdo sobre cooperación marítima para prevenir desastres medioambientales" y añadió que la Benemérita "lo único que hace en esas aguas es perseguir a supuestos delincuentes". Cree que el Peñón sólo busca "justificar que no va a cerrar el acuerdo".

En otro comunicado emitido horas antes, Gibraltar aseguró que la designación de Lugar de Interés Comunitario (LIC) por parte de España de las aguas que rodean al Peñón puede "obstruir el progreso" del Foro de Diálogo y expresó su malestar porque considera que son "aguas británicas".

Para Gibraltar, España ha cambiado "de forma unilateral los objetivos a alcanzarse en medio de este proceso" y por ello, aseguró que no aceptará ni que los españoles "salgan ganando, ni que el Reino Unido y Gibraltar salgan perdiendo. Cualquier acuerdo debe darse en el contexto del status quo anterior, es decir, que se ha de volver a la posición en la que se estaba antes de que España designara el LIC". Gibraltar no tiene duda sobre su jurisdicción en las tres millas de agua que rodean al Peñón y no acepta que se cuestione.