El ministro principal, Peter Caruana, negó ayer que su Gobierno haya desembolsado dinero para poner a disposición del Instituto Cervantes la segunda planta de un edificio en Market Lane.

En una entrevista concedida al Gibraltar Chronicle, el representante político del Peñón aseguró que "no es una cuestión de alquilar, pagar un alquiler y entregar la instalación al instituto. Esa planta está disponible para el Gobierno para que sea utilizada por el Cervantes", puntualizó Caruana, que agregó que no comparte la opinión de la oposición y que, en el caso de haber un edificio público disponible y adecuado, hubiera hecho lo mismo. "Si el Gobierno de Marruecos viniera a Gibraltar diciendo que quiere establecer un centro cultural, le diríamos que sí también", aseveró.

Por otro lado, sobre aquellos que se oponen a la instalación de una sede del Cervantes en Gibraltar, el ministro principal declaró que estas personas, "en primer lugar, deberían saber lo que amenaza y lo que no amenaza al Peñón. En segundo lugar, tienen que dejar de querer que Gibraltar se comporte de un modo distinto a como lo hace cualquier otro país", dijo.

En relación a los obstáculos que han surgido dentro del Foro de Diálogo tras los primeros acuerdos de Córdoba, Peter Caruana manifestó que el principal obstáculo "es el hecho que todas las partes, pero particularmente España y Gibraltar, tienen mucho cuidado en garantizar que lo acordado no perjudique las posiciones respectivas sobre soberanía y derecho a la autodeterminación".

En otro orden de cosas, la oposición indicó ayer que la decisión del Ejecutivo de adjudicar el contrato de construcción de la nueva terminal aérea por 59 millones de euros es "un error de juicio. Además, pone de manifiesto las diferencias en las políticas del Gobierno y la oposición, ya que nosotros nunca hubiéramos procedido a la construcción de una nueva terminal si hubiésemos ganado las elecciones".