El primer resumen

Los hosteleros cifran el aumento de negocio en un 15% respecto a 2014

  • De María destaca que "se nota que había más dinero". El calor "ha sido el mayor enemigo", dice el presidente de los feriantes, pues "las horas de trabajo se nos han quedado en la mitad".

Ha sido una buena Feria del Caballo”. Con esta afirmación resumía ayer el Antonio de María, presidente de la federación hostelera provincial, la marcha de  la fiesta del González Hontoria. “Los datos económicos han sido positivos”, dijo, en clara relación a que, según apuntó en sus declaraciones a este medio, “ha habido quienes han incrementado su negocio respecto al año pasado en un 12% si bien ha habido otros caseteros que han logrado resultados de hasta un 25% respecto a la Feria de 2014. De media, podríamos hablar fácilmente de un crecimiento de entre el 15 y el 20%”.

En palabras de Antonio de María, que ayer auscultó el ‘sentir’ de aquellos asociados  que tienen embajada en el Real de la Feria, “ha sido una celebración en la que se ha notado un mayor gasto, que ha habido más dinero en las carteras, lo que ha motivado que productos que hasta hace unos años se consideraban un verdadero lujo hayan pasado de nuevo a primera línea en las barras y mesas del González Hontoria”. Se refiere el presidente de Horeca al jamón y el marisco, géneros que hasta el momento quedaban reservados para las economías más solventes. “Parece que las ferias de tortillas y pimientos fritos van quedando atrás”. Un factor que De María destacó igualmente es que “la coincidencia con el puente de San Isidro en Madrid ha atraído a mucho visitante de la capital española, personas que suelen tener un poder adquisitivo por encima de la media y a las que los precios de la Feria no les parecen tan caros como pudiera parecerles a otros visitantes”.   

Por su parte, el delegado municipal de Fiestas, Turismo y Cultura, Antonio Real, destacó que ayer aún no disponía de datos efectivos de cómo se ha ido desarrollando la Feria del Caballo. Tan sólo apuntó a este periódico que “ha sido una fiesta que ha destacado por la ausencia de incidentes destacables, que ha contado con mayor afluencia que sus últimas predecesoras en el tiempo así como que los hoteles han disfrutado de mayor ocupación, tanto por parte de turistas nacionales, internacionales y sobre todo de otros puntos de Andalucía y sobre todo de Madrid”.

De otro lado, fuentes municipales aseguraron ayer a este medio que las tareas de atención a los turistas en el recinto ferial se han incrementado este año un 14% respecto a la Feria del año pasado, así como que los representantes de medios de comunicación venidos de fuera de la ciudad también se habían incrementado.

A quienes el buen tiempo y la ola de calor no les ha venido precisamente bien ha sido a los feriantes. El presidente de este gremio, Andrés Llamas, apuntaba ayer que “aún es pronto para hacer cuentas, más que nada porque no dispongo de ellas, lo que es completamente cierto es que el calor ha provocado que nuestras horas de trabajo se hayan recortado de forma drástica. Hay que comprender que no es lo mismo trabajar diez horas al día, que es lo habitual, que hacerlo tan sólo cinco o seis porque el calor aparta a la gente de la zona de las atracciones de Feria”. Eso sí, sobre el poder adquisitivo de quienes se acercaron a los ‘cacharritos’ aseguró que “este año lo he visto mejor que en los anteriores”. Otro aspecto que destacan los feriantes es que al celebrarse este año la Feria del Caballo más alejada en el tiempo de la Feria de Sevilla “hemos tenido más tiempo para montar, hacerlo con menos prisas y no tener que hacerlo todo a la carrera como ha pasado otros años”.

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