La organización terrorista ETA ya estudió en 2010 explorar y sacar provecho de un nuevo ámbito de actuación: el de las víctimas abertzales. Así se desprende de documentos incautados, que revelan que la banda ordenó a la izquierda independentista radical crear su propia asociación de víctimas, incluyendo a los afectados por actuaciones policiales.

Según los datos a los que ha tenido acceso Europa Press, ETA consideró que la nueva organización de víctimas debería tener una composición "ideológicamente plural" en la que se incluirían varios tipos de víctimas. Con el objetivo de legitimar esta iniciativa, eran candidatos a formar parte de esta estrategia los familiares de personas que murieron o resultaron heridos por la actuación de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado en manifestaciones, controles u otro tipo de movilizaciones.

La propia ETA excluía de este proyecto a los familiares de los presos de la banda o de los que califican como "refugiados", ya que consideraba que la nueva organización debía ser compatible con Askatasuna y con Etxerat, que ya existían con una organización y dinámica propias.

ETA quería contar también en esta asociación con las familias de las víctimas de organizaciones como los GAL, la Triple A, los Guerrilleros de Cristo Rey o el Batallón Vasco Español o de lo que ellos denominan "incontrolados uniformados".

De fondo estaba la idea de contrarrestar la presión de la AVT de cara a una hipotética negociación con el Estado y para ello buscaban legitimar y equiparar a sus víctimas con las que la propia banda ha provocado.

Precisamente ayer la presidenta de la Asociación de Víctimas del Terrorismo (AVT), Ángeles Pedraza, advirtió de que llas víctimas del terrorismo nunca aceptarán que se incluya en los reconocimientos y homenajes a gente del mundo de ETA que haya resultado herida o fallecida a manos de las fuerzas de seguridad.

Pedraza censuró que el PSE baraje la idea de incluir entre los homenajeados en el Día de la Memoria a víctimas de abusos policiales y subrayó que "no hay mayor indignidad para la madre de una víctima del terrorismo que tener que sentarse al lado de la madre de un etarra".

En este sentido, reclamó a todos los partidos del Parlamento vasco que rechacen la propuesta y advirtió de que los socialistas ya tenían en mente esta idea desde hace más de un año. "Y ahora quieren dejarlo atado como han hecho con Bildu. Antes de irse -insistió Pedraza- quieren dejar una rémora de desgracias a las víctimas del terrorismo".

El parlamentario del PP vasco Carlos Urquijo también calificó de "despropósito absoluto" la "memoria inclusiva que tratan de aprobar o poner en práctica los nacionalistas y el PSE, que sirva para mezclar en un mismo acto, en el seno del Día de la Memoria, a las víctimas de la violencia terrorista, como pueden ser las de ETA, el GAL o el Batallón vasco-español, con otras personas que han podido ver sus derechos vulnerados, pero que no tienen nada que ver con el terrorismo".