El consejo de administración de Cajasol dio ayer luz verde a uno de los nombramientos más esperados de las últimas semanas, el del nuevo director general de la entidad. El cargo será asumido por Rafael López-Tarruella, ex directivo de la Rural del Sur y uno de los grandes artífices del proceso de integración por el que atravesó esta cooperativa de crédito, fruto de la fusión de las rurales de Huelva y Sevilla en 2001. López-Tarruella sucederá en el cargo a Francisco Javier Romero, quien lo ocupaba en funciones desde el pasado 27 de diciembre, después de que José María Ramírez Loma fuese cesado.

El nuevo director general, que se había acogido al plan de prejubilaciones de la Rural del Sur, tiene 57 años, es licenciado en Ciencias Económicas y Empresariales, diplomado en Alta Dirección de Empresas por el Instituto Internacional San Telmo, auditor de cuentas y experto en Contabilidad y Auditoría de Entidades de Crédito por la Escuela Superior de Cajas de Ahorro (ESCA). Miembro del Consejo Social de la Universidad de Huelva, comenzó su andadura profesional en Banca March y desarrolló buena parte de su carrera en la antigua Rural de Huelva, donde desempeñó, durante una década, responsabilidades como la de jefe de contabilidad, valores y auditoría interna, director de medios e interventor general. Culminada la integración con la Caja Rural de Sevilla, ocupó, entre otros puestos, el de director de la división de Banca de Empresas y Gestión de Patrimonios y fue miembro del Comité de Negocio de la nueva entidad.

Desde Cajasol subrayaron ayer que el perfil de López-Tarruella coincide con el que la caja de ahorros iba buscando, un profesional con una "profunda" experiencia en el sector financiero y ajeno a las dos entidades a las que debe su origen: El Monte y San Fernando. También destacaron su "visión moderna" sobre el sector de las cajas de ahorros, así como sus capacidades en materia tecnológica, "una de las arterias del proceso de integración que vive Cajasol".

El cese de José María Ramírez Loma se produjo apenas siete meses después de que se formalizara la unión entre El Monte y San Fernando, debido a una cierta pérdida de sintonía con el presidente de la caja resultante, Antonio Pluido, y a que el proceso de integración no estaba siendo todo lo rápido y equilibrado que se esperaba. Los trabajadores de Cajasol confiaron ayer en que el nuevo directivo mejore la situación y ayude a romper las tensiones entre los equipos provenientes de El Monte y San Fernando.