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Más cemento que espectadores

  • El notable descenso en el número de aficionados en el Municipal sitúa a la Balompédica en desventaja para poder realizar los solicitados desembolsos en el inminente mercado de invierno

El once de la Balona posa antes del encuentro con el Jumilla, el último en el Municipal. Al fondo la despoblada grada de Preferencia.

El once de la Balona posa antes del encuentro con el Jumilla, el último en el Municipal. Al fondo la despoblada grada de Preferencia. / erasmo fenoy

La inminente finalización de la primera vuelta en el grupo IV de la Segunda divsión B y, por añadidura, la apertura de la denominada ventana invernal de fichajes, sumada a la situación clasificatoria de la Balona -a tiro de piedra de la cuarta plaza pero amenazada en la misma medida por la plaza de promoción- ha abierto ya entre los aficionados el debate sobre si el equipo de La Línea debe apuntalar su plantilla. Detrás de tan importante decisión, la directiva de la entidad se encuentra con un hándicap del que poco o nada se habla, la escasa presencia de aficionados a los partidos de casa.

Tanto el presidente Alfredo Gallardo, en su charla de la pasada semana con la plantilla, como el entrenador, Julio Cobos, en declaraciones a este periódico, se mostraron reacios a cualquier tipo de modificaciones en el plantel durante el próximo mes. Pero en sus palabras se esconde una realidad: no se trata sólo de una cuestión deportiva, siempre abierta al debate, sino económica.

50Consuelo. Apenas medio centenar de personas presenció el Rápido de Bouzas-Talavera

Por mucho que los seguidores más pasionales obvien en su análisis el dato como les corresponde en su posición de hinchas, la fría estadística demuestra que la Balompédica cuenta con un respaldo humano mucho menor que sus más directos rivales con el refejo que eso tiene en las cuentas. No es cuestión de recordar que aquellas caravanas albinegras a algunos desplazamientos ya formen más parte de la historia que de otra cosa, sino que la afluencia al vestusto estadio construido a la sombra del Peñón es muy inferior a la de otros conjuntos de la categoría.

Sin ir más lejos, en el último duelo en casa, el que enfrentó a los linenses con el Jumilla, los ingresos por taquilla no dieron ni para cubrir los gastos que genera el encuentro. Y no hay que olvidar que la Balompédica afronta la andadura con alrededor de un millar de abonados al corriente de pago a pesar de la agresiva campaña del pasado verano y de las facilidades en forma de plazos que la entidad ofreció para el pago del carnet. Apenas 1.300 personas se dieron cita en el Municipal en el duelo con los jumillanos.

Los dos últimos fines de semana han puesto de relieve que la Balona compite en desventaja contra buena parte de equipos. El Extremadura de Almendralejo reunió el pasado domingo a más de 9.000 personas en el Francisco de la Hera (más de 4.500 son socios del equipo azulgrana) en el derbi con el Mérida.

Pero no es el único dato relevante. El propio Cartagena hizo público que 5.100 personas vieron perder a la Balona en Cartagonova, mientras que diferentes medios hablan de que el Badajoz reunió a 3.200 almas y el próximo rival de la Balona, el Real Murcia, a 4.100. Unas 2.800 personas acudieron al Romano en el último duelo como local del Mérida. No hay que olvidar que el Recre acredita una media superior a los 9.000 aficionados desde que comenzó la competición.

A este grupo más significativo hay que sumar otro con sus peculiaridades. El último encuentro del UCAM en casa contó con 2.081 espectadores y el del Melilla, con 1.000, pero ambos cuentan con instituciones que le respaldan de manera notable y que permite que sus economías no dependan de la asistencia de público, situación que se puede aplicar con sus correspondientes matices a los cuatro filiales de la categoría. E incluso es extensible a la peculiar situación del Marbella, que apenas congregó a 800 seguidores ante el UCAM.

Es decir, que por número de aficionados, porque por muy fieles que sean cada uno paga solo una entrada, la Balona debe competir con clubes como El Ejido, San Fernando, Villanovense, Écija.. que acreditan un promedio en las gradas muy similar al de La Línea.

En el apartado contrario están equipos como el Jumilla o el Lorca Deportiva, que apenas logran congregar a medio millar de hinchas.

Fuera ya del grupo IV llaman la atención números como las 12.000 localidades ocupadas en el Hércules-Elche, los 6.000 en el Racing-Real Sociedad B o los 2.200 del equipo de moda en la zona centro, el Fuenlabrada.

Por cierto, el Rápido de Bouzas-Talavera del grupo I, que se jugó bajo los efectos más severos de la potente borrasca Ana, sólo contó con medio centenar de espectadores. Como siempre, el que no se consuela es porque no quiere.

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