Deportes

Un buen día para sonreír

  • La Balompédica persigue en Bahía Sur un resultado positivo que le garantice de manera matemática la permanencia

  • El equipo albinegro, pendiente de los partidos matinales

Primero (y quién sabe si último) de los 'días D' de la Balompédica en la presente temporada. Todo lo que sea puntuar en Bahía Sur esta tarde (19:30) supondrá un salvoconducto virtual para la permanencia de los albinegros, que podrán empezar a respirar al saber que estarán una temporada más en la Segunda división B. El triunfo ya sería un certifcado en toda regla. Julio Cobos desplaza a todos sus efectivos, aunque Olmo lo hace lesionado. Serán muchos los aficionados que acompañen al equipo en este penúltimo desplazamiento del curso con la esperanza de que sea definitivo y que el de dentro de dos semanas a Marbella tenga carácter de viaje de placer. Que la directiva local haya puesto las entradas a seis euros también ayuda bastante.

La Balompédica aspira a poner fin esta tarde a esa larga agonía en la que se está convirtiendo la espera de que su salvación esté sellada de manera oficial. El primer triunfo fuera de 2017, el que logró hace dos semanas en Melilla, y los siete puntos almacenados en las tres últimas jornadas suponen un aval para un equipo que sabe que visita a un rival necesitado, que lo hará en medio de un ambiente de fiesta, pero al que se le dan dado bastante mal los encuentros en los que le ha tocado actuar como local en el presente curso.

La Balompédica, que estará muy pendiente de los resultados de los encuentros que se hayan disputado durante la mañana porque pueden condicionar sus necesidades, llevó a cabo ayer su último entrenamiento prepartido bajo un incesante aguacero.

"El agua sólo moja, no pasa nada", decía al arribar al túnel de vestuario un Julio Cobos al que se ve con enorme confianza en los suyos, por mucho que se reprima para no lanzar las campanas al vuelo. "Uno ha visto tantas cosas ya...", repite para mantener la tensión.

En esta última sesión de la semana no sólo no hubo problemas sino que el brasileño Maurí Franco, que había arrastrado algunas molestias en los días previos, demostró estar en plenitud de condiciones por si su concurso fuese necesario. Por lo tanto la única ausencia es la de Olmo González, que evoluciona favorablemente de la lesión que padece, pero que hace tiempo ya que dijo adiós a la temporada.

El técnico, al tratarse de un desplazamiento muy cercano, determinó ayer que viajasen no ya todos los disponibles, sino todos los integrantes de la plantilla, primero para hacer piña, segundo para prevenir posibles adversidades de última hora y tercero por si se da el caso de que haya algo que celebrar en la caseta, para que ninguno de los que ha puesto su granito de arena durante la campaña tenga que ver el festejo por redes sociales. Los blanquinegros emprenderán el camino hacia la Isla a las 16:30.

En cuanto a la alineación inicial, Cobos, como es norma en él, no ofrece una sola pista, pero después de haber sumado siete de los últimos nueve puntos y de que su revolución post-Mérida le haya dado tanto resultado se antoja poco probable que introduzca cambios en el once. Todo lo que no sea eso se convertiría en una sorpresa mayúscula.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios