La primera jornada de navegación del Gran Prix del Atlántico estuvo marcada por la ausencia de viento. Las embarcaciones, que partieron desde La Línea el pasado miércoles, cumplieron sus primeras 24 horas de competición ayer muy agrupadas, ya que la escasez de viento ha provocado que los barcos más ligeros no hayan podido aún marcar las diferencias respecto al resto.

La competición, que tiene su meta en la isla americana de Martinica, a donde llegarán los participantes después de aproximadamente dos semanas de navegación por el Atlántico, cuenta con sólo un barco de la comarca, el Tío Pepe-La Línea de Mar a Mar.

La embarcación linense se encontraba anoche en la 15ª posición de la prueba, si bien las diferencias son mínimas todavía, a la espera de que el viento comience a hacer aparición y surjan las primeras diferencias claras entre las embarcaciones.

En cualquier caso, el orden de llegada a la isla americana no marcará la clasificación definitiva, ya que, en función del tipo de embarcación, se realizará la clasificación por tiempos compensados que establecerá la general definitiva de la prueba.

La primera posición provisional la ocupaba anoche el Solnes III, que comienza a tomar ventaja respecto al resto, aunque seguido de cerca por el Xixu y el Xaynos IV. La embarcación linense es una de las que navegaba más al noroeste de las participantes.

Los participantes se dirigen en estos momentos a Playa Blanca, en Lanzarote, donde harán escala antes de lanzarse definitivamente a las aguas del Atlántico y cruzar todo el océano para llegar al puerto de meta.