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El Villa busca otra machada

  • Reforzado Tras ganar al Alerta, los barreños despiden la primera vuelta en la pista del segundo, el Alicante, que ya está clasificado para la Copa Bazas Los gualdiverdes, con Rivero disponible, a emular los triunfos de Huelva e Illumbe

El Villa de Los Barrios emprendió ayer viaje hacia uno de esos partidos que de por sí suponen una compensación moral por estar en la séptima mejor competición del planeta. Los gualdiverdes rinden visita esta noche, en el último partido de la primera vuelta, al Alicante Costa Blanca, al que su triunfo de la pasada semana en la siempre difícil cancha de La Laguna ya ha otorgado la clasificación para la Copa del Príncipe de la próxima semana.

El partido enfrenta a Los Barrios no sólo con su primer rival en la categoría cuando desembarcó en la misma en 1997, sino también a su primer enemigo en un cruce de play-off, al término de aquella misma andadura.

Con el paso de los años el conjunto alicantino se ha ganado el derecho de habitar en la planta noble no ya de la LEB, sino del baloncesto nacional. No sólo se trata de su reciente pasado ACB -en el que sólo hay que remontarse a la temporada 2004/05 para recordar cómo puso contras las cuerdas a todo un Unicaja en el play-off- sino de la confección de una plantilla de la que forman parte jugadores como el internacional francés Alain Digbeu, que entran ganas de descubrirse sólo con echar una ojeada a su currículum.

Los gualdiverdes afrontan el encuentro con la moral restañada tras su triunfo sobre el Cantabria, que le permite llegar al ecuador de la competición habiendo alcanzado el objetivo que se trazaron tras las desastrosas cuatro primeras jornadas de Liga: conseguir más triunfos que derrotas en lo que restaba de primera vuelta.

La entidad del contrincante no arruga a los barreños, que ya han demostrado esta misma temporada con sus victorias en canchas tan sumamente complicadas como las del Bruesa o el Ciudad de Huelva que le van los grandes retos y que es capaz de tutearse con lo más selecto. Bien es verdad que el de hoy, por su poderío físico, no es precisamente un equipo que le vaya a los de Moncho Fernández como anillo al dedo.

A lo largo de toda la semana se ha cuestionado la participación de Pedro Rivero, que sufrió un esguince de tobillo en las primeras sesiones, pero el segoviano se montó ayer en el autocar después de ejercitarse con normalidad y todo indica que estará en plenas condiciones.

El técnico barreño, Moncho Fernández, considera que la de Alicante es "junto con la de Cai, Bruesa y Breogán" la mejor plantilla de la categoría.

"Es uno de los partidos más difíciles a los que tenemos que hacer frente, por el presupuesto del rival, sus objetivos, porque tiene una plantilla muy larga y porque físicamente son muy buenos", recalca. "Si sólo han perdido tres partidos en toda la primera vuelta será por algo".

"Con todo eso son vencibles, como todos los rivales", advierte el gallego, que admite que el triunfo sobre Cantabria ha "devuelto la confianza" a su plantilla, que se desplaza "dispuesta a reivindicarse".

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