La victoria ayer de la UD Las Palmas Atlético en el Municipal de La Línea supuso el descenso matemático del Lorca Deportiva, que un día antes había perdido a manos del Jumilla, al que ese triunfo le permite recibir el sábado (18:00) a la Balona con remotas aspiraciones de salvar la categoría.

La jornada estuvo llena de contrastes. Mientras en Lorca lloran por el descenso, en Marbella los aficionados esperaron a las puertas del estadio durante la madrugada a su equipo, que el sábado había empatado en El Ejido y que con ese punto alcanzaba la fase de ascenso. Desde 2009 la ciudad no había competido en una liguilla a Segunda B.

Curiosamente la última vez que logró el pasaporte, el 10 de mayo de 2009, lo hizo en el Municipal de La Línea, al derrotar a la Balona 0-1 con un gol de Carlos Rivera.

La igualada, sin embargo, apea a los costasoleños del primer puesto. Su rival, el Cartagena -que llegará a La Línea en la penúltima jornada- celebró el asalto a la primera plaza en el autocar de regreso desde Sevilla, donde había vencido al Betis Deportivo. "Nos quedan tres finales y tenemos que ganarlas", avisaban los departamentales en redes sociales.

El triunfo del Real Murcia -al que la Balona visita en la última jornada- no es definitivo hasta que el miércoles se dispute el aplazado entre Melilla y Córdoba B.