El Algeciras CF dejó pasar ayer una ocasión de oro para seguir creyendo en la permanencia, cada vez más complicada. El juvenil albirrojo desperdició un penalti en el minuto 82 que pudo haber sentenciado al Puerto Malagueño, un adversario directo en la lucha por la salvación.

Esa acción marcó el partido y terminó por minar la moral de los locales, que a pesar de su mala situación en la tabla, dejaron una buena impresión en el terreno de juego. El Algeciras puso todo de su parte para ganar, pero la mala fortuna se cebó con los pupilos de Juan Antonio García León, que sí supieron reponerse al tanto inicial de los malagueños.

El equipo visitante se adelantó en el minuto 42 al aprovechar una pena máxima que Paco ejecutó.

El gol supuso un jarro de agua fría pero al instante el Algeciras reaccionó. Al minuto del tiempo añadido de la primera mitad Jesús sirvió un pase a Borja, quien resolvió muy bien al ajustar su disparo al palo (46').

El encuentro siguió por unos derroteros muy igualados en la segunda parte. Posesión repartida y pocos acercamientos a las áreas.

El Algeciras se quedó con uno menos en el 80' por la expulsión de Iván y a los dos minutos tuvo el citado penalti que pudo haber decantado la balanza. Pero Adri detuvo el tiro de José Mari. Al minuto los albirrojos se quedaron con nueve y se defendieron.