Las once ex limpiadoras que prestaban sus servicios en los acuartelamientos militares de la guarnición del Campo de Gibraltar denuncian que la empresa para la que trabajaban, Los Lebreros, les adeuda dos meses de salario y la paga extraordinaria además de haberse quedado en paro por la rescisión del contrato de servicios por parte de Defensa.

Las perjudicadas explicaron a este diario que llevaban varios años trabajando para una empresa cuando, a primeros de 2009, fueron subrogadas en esta compañía que, al poco tiempo de comenzar sus servicios en los acuartelamientos, modificó unilateralmente las condiciones laborales. Según sus testimonios, pasaron de trabajar ocho horas diarias a tres horas y veinte minutos, por lo que varias de ellas denunciaron ante el Juzgado de lo Social de Algeciras al ver mermados sus salarios. Tres de ellas aseguran haber ganado el juicio mientras que otras trabajadoras están pendientes de la celebración de la vista. Sin embargo, sus problemas no acaban aquí. Las limpiadoras señalaron que el Ministerio de Defensa ha decidido prescindir de los servicios de Los Lebreros "por no tener garantizados los fondos para abonar el segundo semestre". Como consecuencia de esta situación, la empresa las despidió generándose además la deuda antes referida.

Este diario intentó contactar, sin éxito, con Los Lebreros para que aportara su versión de los hechos. Las ex trabajadoras aseguran que sus puestos de trabajo están siendo suplidos por los militares, lo que consideran que se sitúa fuera de sus funciones además de perjudicar la posibilidad de volver a sus antiguos empleos.