"Si duele no es amor". La escueta frase pintada con rotulador negro sobre una cartulina violeta surge por encima de las cabezas de miles de personas reunidas en la Plaza de Andalucía de Algeciras. La levanta una niña de unos 15 años que empieza a gritar: "¡Basta ya!". Un coro de voces juveniles le sigue, inmediatamente, en la consigna. Son los 1.500 alumnos de diez institutos de Algeciras que ayer se sumaron a la marcha que la Asociación de Mujeres Progresistas Victoria Kent organizó en la ciudad para conmemorar, con 24 horas de adelanto, el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer.

La comitiva partió de la Plaza de Andalucía, bajó por Blas Infante, continuó por Capitán Ontañón y Fuerte de Santiago hasta la avenida Virgen del Carmen, desde donde subió hasta la Plaza Alta. Allí se celebró el acto central, que comenzó con cinco minutos de silencio y continuó con la lectura de un manifiesto en el que los participantes reivindicaron el fin del "terrorismo machista" que ese mismo día le había costado la vida a una mujer embarazada en Castellón. Alertaron los organizadores de un aumento en las agresiones machistas que se producen en parejas adolescentes, que es lo más preocupante de esta lacra a la que hay que combatir "desde la Educación con mayúsculas", es decir, desde las familias, los colegios y los institutos" para alcanzar algún día "la igualdad real".

"De camino a casa quiero ser libre, no valiente" o "con ropa o sin ropa, mi cuerpo no se toca", se leía en otras de estas pancartas improvisadas por los alumnos de Baelo Claudia, Bahía de Algeciras, Ciudad de Algeciras, García Lorca, Getares, Las Palomas, Isla verde, Kursaal, Ventura Morón y Saladillo, que acudieron a la llamada de la profesora Ana López, de este último instituto. Leyeron representantes de Victoria Kent y también de colectivos como Barrio Vivo o Alternativas, además de partidos políticos (todos los de Algeciras) que acudieron a la con vocatoria. Pero sobre todo leyeron parte del manifiesto Lucía Corrales y Javier Morilla, dos alumnos del Ciudad de Algeciras que se erigieron en la voz de todos los jóvenes congregados en la Plaza Alta.

Por la mañana, en el histórico salón de Plenos del Ayuntamiento de Algeciras se celebró el acto institucional en el que buena parte de la sociedad algecireña mostró su rechazo hacia la violencia de género. El primer teniente de alcalde, Jacinto Muñoz, presidió este acto junto a la teniente de alcalde delegada de Bienestar Social, Paula Conesa, que fue la encargada de leer el manifiesto, que contó con el máximo respaldo institucional, social y político.

Después, todos los colectivos e instituciones presentes firmaron un documento de compromiso con las víctimas. Lo rubricaron los distintos grupo políticos con representación en la corporación municipal, el presidente de la Mancomunidad de Municipios, un representante de la Junta de la Andalucía, parlamentarios andaluces de los grupos Socialista y Popular, el fiscal de violencia de género, el equipo UFAM de Policía Nacional, así como el equipo Emume de la Guardia Civil, y el superintendente jefe de la Policía Local. También, el delegado en Algeciras del Colegio de Abogados, el Servicio de Asistencia a las Víctimas de Andalucía (SAVA), el Servicio Andaluz de Salud, la directora de la Once y las representantes de los colectivos femeninos presentes en el acto, Victoria Kent y Aficagi. Esta semana, numerosos centros han organizado charlas y conferencias para conmemorar el 25-N, como el IES Baelo Claudia, un centro de referencia en el trabajo para concienciar en la aulas que otorga formación en igualdad a sus 400 alumnos. La Marea Violeta ha convocado hoy una concentración en la Plaza Alta a las 19:00.

En La Línea, el CEIP Santiago y el CEIP San Felipe conmemoraron el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer con una marcha desde los colegios hasta el centro de la ciudad. Los alumnos de educación infantil y primaria mostraron sus reivindicaciones a través de lemas y carteles durante todo el camino. A la llegada a la Plaza de la Constitución se leyó un manifiesto por parte de alumnos de 5º y 6º curso y algunos poemas en recuerdo de las víctimas por violencia de género. La marcha acabó con un minuto de silencio secundado por alumnos y profesores al que se unieron ciudadanos con los coincidieron en el trayecto. Esta tarde a las 18:00, el colectivo Orgullo y Diversidad ha convocado una concentración en la Plaza de la Iglesia a la que se sumaron varios colectivos y partidos políticos.

En San Roque, la Asociación de Mujeres Molino de Fuego, con la colaboración del AMPA del CEIP San Bernardo y de la comisión de fiestas de la barriada, organizó una concentración que comenzó con una representación teatral en la que se reivindicaba la memoria de las mujeres asesinadas en España por sus parejas. A continuación se leyó un manifiesto, se guardó un minuto de silencio, se soltaron globos morados y se izó un lazo de igual color. Acudieron el alcalde, Juan Carlos Ruiz Boix, y varios concejales.

En el IES Carlos Castilla del Pino, los alumnos y alumnas realizaron un acto en el patio vestidos de negro. Leyeron los nombres de las víctimas mortales de este año así como los de sus asesinos, y contaron las circunstancias de las muertes, mientras otros compañeros ponían esos nombres en la fachada del centro. Finalmente se guardó un minuto de silencio.

En Los Barrios también los colegios celebraron actividades relativas a la lucha contra la violencia de género. El CEIP San Isidro Labrador lleva toda la semana abordando el tema y concienciando a los alumnos de Educación Infantil y Primaria (500 niños y niñas, aproximadamente) a través de una visión crítica de los cuentos populares que de forma implícita expresan estereotipos machistas que a veces encubiertos siguen hoy en día en nuestra sociedad actual. El colegio amaneció con un gran telón morado de fondo, con la leyenda viajando entre cuentos y empapelado con la letra de la canción de Manuel Carrasco Mujer de las mil batallas. A media mañana se realizó un emocionante izado de una enorme bandera blanca, con el lazo morado, por parte de dos de los nuevos alumnos de tres años.