Las asociaciones de la Guardia Civil no tardaron en reaccionar ayer ante el disparo recibido por su compañero de Málaga. Tanto AUGC como AEGC remitieron comunicados de prensa alertando de que éste es un nuevo caso de violencia hacia los miembros de los Cuerpos de Seguridad del Estado, violencia que "ha llegado a un extremo de gravedad preocupante", reclamando refuerzos para el Campo de Gibraltar.

"Tenemos que lamentar nuevamente los hechos", destacaba la AUGC, denunciando que los miembros de Cuerpos de Seguridad del Estado "se ven desamparados ante la falta de medios y de agentes y observamos cómo seguimos padeciendo agresiones cuando tenemos que intervenir para impedir el aborto de un alijo de droga o aprehensión de tabaco. Hoy ha sido en Algeciras, hace unos días fue en La Línea y vemos cómo en la comarca siguen sin tomar las medidas necesarias para garantizar la seguridad de los agentes del orden".

En el mismo sentido se pronunció la AEGC, asegurando que "a lo largo de estos últimos meses la tensión en la comarca del Campo de Gibraltar ha vuelto a aumentar". Este incremento se produce "aprovechando que opinión pública, medios de comunicación y autoridades políticas mirábamos para Cataluña y concentrábamos allí una parte de ese personal que había estado reforzando la lucha contra el narcotráfico y que había permitido unos meses de relativa calma en la comarca". ¿Cuál es el resultado? "Estos delincuentes llevan semanas campando a sus anchas, alijando impunemente en nuestra costa porque son perfectamente conscientes de que los guardias civiles de la comarca del Campo de Gibraltar estamos otra vez solos", señaló la asociación.

Denuncian además que "ellos se arman y mientras los guardias civiles seguimos sin contar con chalecos antibalas individuales, de nuestra talla y operativos".