El Ayuntamiento cerró ayer el plazo para la presentación de alegaciones al Plan General de Ordenación Urbanística (PGOU), que ha estado expuesto al público durante un mes tras la aprobación inicial en pleno.

Durante este plazo, el registro municipal de entrada ha recibido 280 escritos de alegaciones, si bien es necesario analizar si todos ellos responden a otros tantos asuntos o si se producen repeticiones. De hecho, un primer recuento realizado por el personal de la Oficina Técnica determina que el 80 por ciento de los escritos, en torno a 225, se centran en cinco cuestiones básicas presentadas por 35 personas diferentes, según explicaron fuentes del departamento municipal de Urbanismo.

El cinco por ciento de las alegaciones, unas 14, han sido presentadas a título particular por propietarios de terrenos que reclaman una clasificación de suelo más favorable. El resto proceden de los distintos grupos ecologistas de la comarca. Todos los colectivos conservacionistas presentes en la zona han concurrido en el proceso, así como el Partido Andalucista.

El cómputo de alegaciones final será el resultado del análisis de los escritos presentados, para evitar que haya dos alegaciones que respondan al mismo planteamiento, según Urbanismo.

Los escritos giran en torno a cinco cuestiones principales. La clasificación del suelo de La Gertrudis; el recinto ferial; el uso de las llanuras del río Palmones en la Vegal del Fresno; diversas infraestructuras y el trazado de nuevas calles en zonas como parques del casco urbano.

En cualquier caso, todos los escritos presentados ante el Consistorio deberán ser respondidos por la Administración con la argumentación pertinente que determine si son aceptadas finalmente como alegaciones o no.

Paralelamente, Urbanismo espera que los informes sectoriales emitidos por la Administración andaluza y estatal con sus correspondientes consideraciones lleguen, como muy tarde, en enero. A partir de ahí, y ya respondidas e integradas las reclamaciones, la Corporación deberá celebrar un nuevo pleno para la aprobación provisional y remitir el documento a la Comisión Provincial de Urbanismo para su estudio final.