El soterramiento de la circulación las calles Independencia y Victori Goñalons se hará "respetando" los restos de la muralla portuguesa que se han descubierto después de que el pasado fin de semana se llevaran a cabo varias catas arqueológicas. El presidente de la Ciudad, Juan Vivas, destacó ayer que los informes arqueológicos determinarán y condicionarán la actuación de las empresas constructoras que opten a la realización de este importante proyecto, que pretende descongestionar el tráfico de la zona centro desviándolo a través de pasos subterráneos. "El objetivo prioritario es la mejora del tráfico, pero también lo es poder recuperar parte de un patrimonio histórico que está oculto ahora mismo", explicó durante una visita a las obras de mejora en el Recinto Sur.

El jefe del Ejecutivo ha subrayado que las catas y planos antiguos de la zona han determinado la localización exacta de estos restos históricos, lo que contribuirá no sólo a determinar el proyecto de soterramiento, sino también a la conservación y puesta en valor de esta muralla "que en su mayor parte está escondida y que con esta actuación podría quedar exenta para que podamos disfrutar de ella los ceutíes y quienes nos visitan".

La Ciudad Autónoma no tiene aún fecha para el comienzo de estas obras, que están presupuestadas en unos 60 millones de euros e incluyen otras actuaciones paralelas, como la reurbanización del puente de la Almina, la construcción de una gran plaza pública y dos plantas subterráneas de aparcamiento. De momento, estos trabajos están supeditados al resultado no sólo de las catas arqueológicas, sino también de los estudios geotécnicos.

Respecto a los resultados obtenidos en estas prospecciones iniciales, que sacaron a la luz restos de la muralla portuguesa, la portavoz del Gobierno aseguró el pasado lunes que no se pueden concretar hasta contar con el informe del técnico de Cultura, que calcula no se demorará "más de una semana".