La Ciudad Autónoma invertirá unos 150.000 euros en la compilación de normas urbanísticas que refundirá y actualizará todos los reglamentos vigentes en la materia. Tal como señaló el consejero de Fomento, Juan Manuel Doncel, aunque en un principio, y según informó este diario el pasado mes de junio, estaba previsto proceder a la contratación del trabajo a mediados de año, un problema con la consignación presupuestaria obligó a posponer la convocatoria del concurso, cuyo pliego de prescripciones técnicas se entregó al departamento de Contratación hace unas semanas. De esta forma, Doncel confía en que el trabajo de redacción del nuevo Reglamento refundido pueda sacarse a licitación pública este mismo mes. De cumplirse los plazos que se manejan en la Consejería, la compilación de la normativa podría estar terminada en 2010, pues saldrá a licitación con un plazo de ejecución de 15 meses.

Entre las novedades que contemplará la reglamentación urbanística ceutí, el consejero se refirió especialmente a la última que se ha conocido, relacionada con el Reglamento de Actividades Molestas e Insalubres (RAMI), en el cual podría introducirse una nueva norma, de ámbito nacional y actualmente en proceso de elaboración por parte del Ejecutivo central, cuyo objetivo es la simplificación de los procedimientos de implantación de actividades económicas. Tal como explicó Doncel, el borrador de esta nueva normativa, que ha sido sometido a consulta por parte de las Cámaras de Comercio, le fue dado a conocer por el presidente de la institución cameral ceutí, Luis Moreno, en una reciente reunión en la que hablaron de la situación de los polígonos del Tarajal. El consejero considera que el reglamento unificado de Ceuta podrá recoger ya este tipo de novedades para evitar que en un futuro próximo haya de ser revisado de nuevo. La nueva normativa recogerá, tal como indicó en su momento el responsable de Fomento, los reglamentos de ejecución de la vigente Ley del Suelo (8/2007) y del Real Decreto 1346/76, Refundido de la Ley del Suelo y Ordenación Urbana, así como el también vigente en la materia del año 92, junto con los reglamentos de gestión, disciplina y ordenación y las ordenanzas municipales. En este último ámbito, se incluirá una norma de nueva creación, "la más demandada", según reconoce el consejero, que será la de Inspección Técnica de Edificios.

Se trata, en palabras de Doncel, de una "reunificación y codificación" del marco normativo que definirá las competencias de la Ciudad y recogerá, por tanto, su "singularidad" en este ámbito. El texto favorecerá, en su opinión, una tramitación "correcta y ágil" de los procedimientos, lo que dará mayor seguridad jurídica a las actuaciones de la Consejería de Fomento.

Así, a partir de la aprobación de este código, se contará con una herramienta única para asuntos tales como la concesión de licencias de obras o declaraciones de ruina, así como para regular "todos los aspectos que afectan al planeamiento y la gestión urbanística". La recopilación normativa se ampliaría también a la regulación de asuntos entre los que se cuentan la regulación de la ocupación de dominio público, vados, instalación de terrazas y veladores o mobiliario urbano. Se trata de una labor de una importante "envergadura" que, según señala el máximo responsable de Fomento, requiere de la participación de técnicos especializadas tanto en urbanismo como del ámbito jurídico, personal del que la Consejería de Fomento no dispone para dedicar en exclusiva a esta tarea, motivo por el cual se ha decidido optar por la contratación externa.