La violencia machista ha mostrado esta semana su cara más brutal con los asesinatos a manos de sus parejas o ex parejas de cuatro mujeres en los últimos tres días, unos dramáticos hechos que han reactivado la alerta entre los distintos sectores implicados en su erradicación. La principal reacción llegará de la mano del Gobierno, que aprobará en junio la Estrategia Nacional contra la Violencia de Género, que incluye 250 medidas para "atacar" el problema desde todos los ámbitos y que incidirá en "visibilizar con mucha fuerza a los menores", que "muchas veces son instrumentalizados contra sus madres".

La delegada del Gobierno para Violencia de Género, Blanca Hernández, confirmó ayer su aprobación por el Consejo de Ministros en junio, después de que el texto pase por la Conferencia Sectorial de Igualdad y el Observatorio Estatal de Violencia sobre la mujer. Hernández condenó el último crimen machista, ocurrido la el jueves por la noche en Santander, y desmintió que en la reforma del Código Penal vaya a desaparecer el agravante cuando el asesinato se produce delante de los hijos. De la estrategia nacional contra el maltrato dará "pormenorizada cuenta" la ministra de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, Ana Mato, en un comparecencia en el Congreso el próximo miércoles.

Hernández insistió en la necesidad de denunciar la violencia, ya que en el último año se ha producido un "ligero descenso" de las denuncias. De las cuatro mujeres asesinadas desde el martes, tres no habían denunciado y la cuarta, que fue estrangulada por su ex pareja, sí lo había hecho pero había rehusado declarar en el juicio. Además, tres de estas cuatro víctimas no superaban los 30 años, e incluso una de ellas contaba con sólo 19.

Desde el ámbito judicial, la presidenta del Observatorio contra la Violencia Doméstica y de Género, Inmaculada Montalbán, consideró necesario intensificar las acciones de prevención contra la violencia machista, así como incidir en la educación de los jóvenes.

En declaraciones a Efe, Montalbán lamentó los cuatro asesinatos, que son "un ataque a la dignidad humana y a la democracia", y abogó por intervenir "cuanto antes" en la educación en favor de la igualdad entre los jóvenes, "uno de los caminos que queda por recorrer". En este sentido, mostró su preocupación por la desaparición de la asignatura de Educación para la Ciudadanía en Primaria y Secundaria, que incluía en sus contenidos la formación en igualdad de género.

En la misma línea se manifestó la responsable del Ministerio Público en este ámbito, Soledad Cazorla, quien estima necesario "hacer mucho hincapié en todas las medidas que se refieran a la detección y a la prevención de la violencia sobre la mujer". "No se puede infravalorar este fenómeno y este problema que tiene la sociedad y que nos debe producir alarma", indicó Cazorla, quien opina que "la justicia funciona" cuando se activa el proceso.

La fiscal de Sala de Violencia sobre la Mujer pidió a las mujeres maltratadas "que no tengan miedo", que confíen en la administración y denuncien para poder salir del "pozo del maltrato".

El PSOE también instó a no "bajar la guardia" ante esta lacra porque, según su secretario general, Alfredo Pérez Rubalcaba, "cuando se trata de vidas humanas no caben retrocesos legales ni recortes presupuestarios. Además de Rubalcaba, la vicesecretaria general socialista, Elena Valenciano, reclamó al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, que se ponga al frente de esta lucha para situarla en el máximo nivel de la agenda política.

Respecto al asesinato de Santander, ayer trascendió que el hombre que estranguló a su ex mujer tuvo una orden de alejamiento y comunicación de la víctima hasta enero, cuando el Juzgado de Violencia de Género de la capital cántabra retiró las medidas cautelares acordadas contra A. A. P., de 37 años y de origen peruano. El hombre llegó al domicilio de la víctima dos horas antes del suceso para llevar al hijo de la pareja, de 4 años. Fuentes policiales explicaron que durante las dos horas que el agresor estuvo en el domicilio de su mujer, ambos estuvieron discutiendo hasta que A. A. P. agarró a L. G. A por el cuello. Los agentes encontraron el cuerpo de la mujer en el salón de la casa.