La Línea

El Ayuntamiento planea externalizar la gestión del Palacio de Congresos

  • El municipio busca captar la celebración de eventos profesionales, su principal carencia, por su impacto en la economía La entidad quiere mantener el control sobre espectáculos y cultura

El Ayuntamiento de La Línea baraja externalizar parte de la gestión del Palacio de Congresos y Exposiciones para dotar al recinto de un calendario estable de eventos y reuniones profesionales; hasta ahora una de las principales carencias en cuanto a usos del inmueble pese a ser el único recinto de su clase, capacidad y tamaño en un centenar de kilómetros a la redonda.

El concejal de Actos Públicos y Turismo, Ignacio Macías, detalló ayer que la entidad local estudia junto con el departamento jurídico la fórmula más adecuada para articular el concurso dado que se pretende mantener en el ámbito de lo público la gestión de los eventos culturales y de ocio. "La intención es sacar a concurso parte del uso del Palacio de Congresos, la relativa a los congresos y eventos de colectivos profesionales, por ser un mercado complejo al que no tenemos acceso directamente. La parte cultural y de ocio sí tiene una actividad notable y continuada a lo largo del año a través del gerente municipal que concierta las actuaciones y los propios empresarios, que acuden a nosotros con la intención de utilizar las instalaciones", apuntó Macías.

Sin embargo, el edil reconoció que el palacio cojea en cuanto a su propósito original, los congresos, que reportarían un importante efecto inducido en la economía linense y del Campo de Gibraltar a través de estancias hoteleras, restauración y ocio. "Queremos captar parte de ese mercado y para ello contamos con un recinto único, la joya de la corona en la comarca. Nadie tiene un palacio de congresos a 500 metros de un aeropuerto. El alcalde tiene claro, al igual que yo, que el edificio hay que mimarlo", comentó Macías.

El edil de Actos Públicos apuntó que el edificio requiere de una revisión del sistema de climatización (que falló este verano) y pocos remates más para estar en perfecto estado, dado que el inmueble apenas tiene diez años. "La prueba de que está bien es que se usa para eventos y espectáculos. Pero no ha tenido mantenimiento nunca y necesita una inversión en el aire acondicionado", reconoció el concejal.

Una de las opciones que se plantean en el Ayuntamiento para no tener que hacer frente por anticipado al importe de las reformas pasa por que el adjudicatario de la gestión asuma la inversión a cuenta de los primeros pagos en concepto del canon municipal.

"Mi objetivo, que a su vez es compartido por el gobierno local, es dar contenido al palacio para que sea un recurso turístico y de generación de riqueza más en la ciudad con los congresos que resulte complementario a la oferta de ocio y eventos que ya tenemos", sostuvo Macías.

El recinto, abierto en 2005, tiene una superficie construida que supera los 5.300 metros cuadrados y capacidad para hasta 2.000 personas. Su interior se articula en torno a dos grandes áreas: el auditorio principal y el auditorio de conferencias. Además, posee un escenario de 200 metros cuadrados y 10 metros de altura, que permite la celebración de eventos como teatro, danza, conciertos e incluso ópera. Este tipo de eventos forman parte de la programación habitual.

El auditorio de conferencias tiene 354 plazas y es totalmente independiente, lo que permite desarrollar distintas actividades simultáneamente o complementarse en caso necesario.

El Ayuntamiento de La Línea obtuvo la titularidad total del recinto expositivo hace prácticamente un año, en octubre de 2015. Esa primavera el Servicio Provincial de Recaudación y Gestión Tributaria de la Diputación de Cádiz dictó el embargo y subasta de la mitad de este inmueble, cuya titularidad mantenía hasta entonces Ámbito Sur Hoteles (Asur), por deudas en conceptos de IBI, tasas de basura y otros ingresos de derecho favorables al Ayuntamiento de La Línea (que poseía la otra mitad). Esa mitad del edificio salió a concurso tres veces, dos veces mediante subasta abierta y una mediante proceso de adjudicación directa, que fracasaron. Como consecuencia, la entidad local se hizo con el 100% del edificio.

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