La Línea

Por un futuro saludable

  • Los talleres de verano de Asuntos Sociales vuelven tras cuatro años de suspensión A través del ocio trabajan en la prevención de adicciones

Los juegos populares marcan la mañana del jueves en el centro social Federico García Lorca de La Línea. Un grupo de niños salta a la comba mientras otros pequeños se afanan en construir cometas con la esperanza de que el viento de Levante, tan presente este verano, les deje hacerlas desfilar por el cielo.

Se trata de una jornada más del taller de verano de Asuntos Sociales organizado por el Ayuntamiento de La Línea al amparo del programa Ciudades ante las drogas. Tras cuatro años suspendida, la iniciativa -con apoyo económico de la Junta de Andalucía y una aportación municipal- ha sido retomada esta temporada estival para promover hábitos saludables y prevenir las adicciones desde edades tempranas a través de actividades lúdicas. Así, casi sin darse cuenta, los niños participantes, con edades comprendidas entre los 6 y 12 años, aprenden la importancia de llevar una vida sana, libre de drogas, alcohol o tabaco.

Las actividades en el García Lorca se desarrollan con un grupo de niños de las barriadas colindantes de Los Junquillos, Mirasierra, La Colonia, Miramar-Mondéjar, Andalucía y San Pedro hasta el próximo 9 de septiembre, víspera del arranque del curso escolar.

Semanas atrás, entre finales de junio y los primeros días de agosto, la iniciativa llegó a las zonas de Levante, La Atunara y San Bernardo, en las instalaciones de la asociación de vecinos Esperanza (de San Bernardo) y en las pistas deportivas del centro polivalente de la barriada. Son, en ambos casos, áreas residenciales consideradas por la administración como Zonas con Necesidades de Transformación Social (ZNTS), donde los técnicos consideran que este tipo de acciones preventivas deben ser puestas en marcha para lograr, a largo plazo, una regeneración social.

"Si hacen un mural, por ejemplo, se basa en colocar en dos partes elementos positivos y negativos para la salud. A la hora del desayuno se pide a los padres que traigan fruta o un pequeño bocadillo y eviten la bollería industrial. Y, por supuesto, que intenten prolongar ese hábito durante el próximo curso escolar", explica Ana Ciatelo, técnico de Asuntos Sociales de la entidad local.

Cuatro monitores -una psicóloga, un diplomado en Magisterio, una graduada en Comunicación Audiovisual y un técnico en Actividad Física y Deporte- contratados con la subvención regional, forman el conocido como equipo de calle que dinamiza las mañanas en los talleres y, a la vez, desgranan las materias transversales de prevención.

El desarrollo personal, la creatividad, la resolución de conflictos, el fomento de la actividad deportiva o de la expresión quedan agrupados en las actividades, con nombres atractivos como Tiki Taka o Qué arte tengo que no sólo se realizan en el centro. Los niños de La Atunara, por ejemplo, han realizado sesiones de relajación en la playa en las que se inculcó el respeto al medio ambiente o visitas al Museo Cruz Herrera. También han grabado un cortometraje para difundir todos estos valores.

Los técnicos se muestran satisfechos con la aceptación del programa tras varios años en dique seco. Además de muchos niños, también se ha logrado la implicación de los padres, a los que se les cita a reuniones para explicarles cómo funciona el programa, los objetivos que se persiguen, para que los refuercen en casa. La respuesta de la familia también resulta positiva, a tenor de las encuestas de satisfacción rellenadas en la zona de Levante.

En total, los talleres de verano de La Atunara ya concluidos lograron la inscripción de 102 niños, con un promedio de 40 participantes al día. "La asistencia es libre, para no generar un sentimiento de obligación ni de campamento de verano al uso que puede resultar contraproducente", apuntan. Las actividades que estos días se hacen en Los Junquillos cuentan con 87 inscripciones y una media diaria de participación de 35 menores.

Asuntos Sociales pretende que ahora, tras haber logrado recuperar esta línea de trabajo con la administración regional, las actividades puedan abarcar el curso escolar cuyo arranque está a la vuelta de la esquina.

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