Desempleados de La Línea, en su búsqueda, la mayor parte de las veces desesperada, de un puesto de trabajo, se amontonan cada mañana en las inmediaciones del futuro nuevo Hospital comarcal del SAS de la ciudad para solicitar que se le incluya entre los que tomarán parte en las obras de finalización de dicho centro. Los parados linenses piden a las autoridades locales que medien para tener prioridad a la hora de ocupar las vacantes.

La presidenta de la Junta de Andalucía, Susana Díaz, se comprometió en su última visita a la ciudad a que los trabajos comenzasen antes de que finalice el mes de noviembre y la actividad que se registra en el recinto invita a pensar que será así.

Los aledaños de lo que será el nuevo Hospital de La Línea han recuperado en los últimos días el trasiego que había desaparecido desde que la empresa constructora retirase en octubre de 2013 las grúas y andamios, que habían quedado sin actividad por la falta de presupuesto. Este periódico ya dio fe la pasada semana de que FCC había comenzado a instalar la maquinaria con la que continuará con las labores interrumpidas.

Con este reclamo, cada mañana son decenas los desempleados de La Línea que se acercan a la obra para solicitar trabajo. La mayor parte de ellos son albañiles a los que la crisis del ladrillo se llevó por delante, pero están representados muchas otras profesiones relacionadas con la construcción.

"Alguien tendría que velar para que en una ciudad con este índice de paro, los linenses tuviésemos prioridad a la hora de ser contratados", defendía ayer uno de los solicitantes. "Pero si además se ayuda a los padres de familia de La Línea, mejor", acabó.