La ordenanza municipal reguladora de la administración electrónica ya es definitiva al haber transcurrido el plazo de exposición al público y no haber sido presentada ninguna reclamación, si bien ahora cabe interponer recurso por la vía de lo Contencioso Administrativo.

El objetivo de dicha normativa, que fue aprobada por el pleno de la Corporación de manera provisional el pasado mes de diciembre, es regular la implantación progresiva de la administración electrónica en el ámbito del Ayuntamiento y de sus organismos y entidades dependientes, "facilitando la prestación de servicios a la ciudadanía a través de medios electrónicos y garantizando que la interacción con todo tercero se pueda materializar a través de las tecnologías de la información y las comunicación para hacer posible la consecución más eficaz de los principios de transparencia administrativa, proximidad y servicio a la ciudadanía", señala el texto de dicha ordenanza, publicado ayer el Boletín Oficial de la Provincia (BOP).