La compañía española Iberia confirmó ayer a Europa Sur que suspenderá los vuelos entre Gibraltar y Madrid a partir del próximo día 28, fecha en la que se realizará el último viaje, al menos por el momento. La aerolínea añadió que desconoce "cuándo se volverá a operar o si va a continuar".

Iberia no ha realizado un comunicado oficial al respecto pero ya ha informado a los usuarios de esta ruta que tenían un billete comprado para el mes de octubre de que los vuelos van a ser suspendidos "por motivos operativos". La realidad es que el servicio no ha funcionado como se esperaba y la propia compañía reconoció a este diario que "no hay suficiente demanda" y por eso se ha tomado esta decisión. Por lo que respecta a esos pasajeros afectados, "se les van a ofrecer otras alternativas, entre ellas volar desde Málaga".

Fue el 16 de diciembre cuando se restablecieron los vuelos entre España y Gibraltar. Aquel día, un airbus 139 de Iberia con capacidad para 140 personas partió de Barajas a las 11:50 y aterrizó en North Front en torno a las 13:00. Políticos, periodistas y diplomáticos fueron los primeros en disfrutar de un vuelo histórico.

Entre los pasajeros se encontraban el secretario de Exteriores, Bernardino León; el consejero de la Presidencia de la Junta de Andalucía, Gaspar Zarrías; el director general de Política Exterior para Europa y América del Norte, José Pons, interlocutor español en el proceso de diálogo; y su homólogo británico, Anthony Smith, que sustituyó a Dominick Chilcott cuando las conversaciones ya estaban avanzadas. También fue en ese avión el alcalde de La Línea, Juan Carlos Juárez.

Otras personalidades destacadas de la política estuvieron a pie de pista y tampoco quisieron faltar a una cita tan especial. Fue el caso del subdelegado de la Junta de Andalucía en el Campo de Gibraltar, Rafael España; el diputado nacional Salvador de la Encina; el representante del Ministerio de Exteriores en la comarca, Esteban Bravo; y el secretario general del PSOE de La Línea, Miguel Tornay, entre otros.

Iberia realizaba dos vuelos diarios pero en noviembre del año pasado tuvo que reducir el número y la ruta pasó a ejecutarse sólo dos días en semana, los viernes y domingos.

La aerolínea española señaló entonces que había tomado esta determinación porque las tasas que hay que pagar en el aeropuerto del Peñón, propiedad del Ministerio de Defensa británico, eran muy altas. También anunció que mantendría operativos esos vuelos porque consideraba que había demanda suficiente, cosa que al final parece que no ha sido así tal y como ha confirmado a este diario.