Tras unas semanas de relativa fluidez, las colas salvajes volvieron en la tarde de ayer a la Verja de Gibraltar con un tiempo máximo de espera para entrar en La Línea en coche de tres horas y 23 minutos hacia las 17:30 horas. Con los retrasos volvieron también las protestas de los ciudadanos que se vieron atrapados en el paso fronterizo y que expresaron su indignación con llamadas a este periódico y/o a través de las redes sociales.

Las demoras, tan habituales meses atrás, se producen cuando España y Reino Unido negocian la celebración -a juicio de los diplomáticos, inminente- de una serie de reuniones que se realizarán en Bruselas y en las que se tratara, entre otros, este problema. En dichas citas estarán presentes representantes del Gobierno de Gibraltar, de la Junta de Andalucía y de la Mancomunidad de Municipios de la comarca.

Las colas vuelven, además, cuando el Ministerio del Interior y la Agencia Tributaria española están llevando a cabo una serie de remodelaciones en la frontera, que culminarán antes del primer semestre de 2015, y que supondrán una reforma integral de la Aduana que ayudará a hacer más efectiva la lucha contra el contrabando de tabaco aligerando el tránsito. El sistema de paso en el tiempo que duren estas obras recibió bastantes críticas el mes pasado.

Durante la mañana de ayer el paso fue bastante continuado, pero hacia las cinco de la tarde, conforme los agentes de la Aduana de La Línea intensificaron los controles de los vehículos, comenzó a formarse una cola que alcanzó su punto máximo media hora después, cuando ya estaban ocupados por completos los seis carriles del serpentín.

A partir de ahí el ritmo de paso fue aumentando levemente, pero rondó las dos horas de espera durante hasta casi las siete de la tarde, cuando comenzó a despejarse realmente la salida hasta registrar una media hora de demora cuando oscureció.

La última jornada de largas colas fueron en la jornada festiva en España del pasado 13 de octubre.

El Gobierno de Reino Unido afirmó a finales de septiembre que si persisten las colas una vez que España haya remodelado la Aduana según las indicaciones de la Comisión Europea (CE) efectuará una denuncia en Bruselas.

A raíz de la última visita de los observadores europeos a la Verja la CE emitió un informe que no dejaba bien parados ni a España ni a Gibraltar. Al primero le señaló porque los controles que se disponen en las instalaciones fronterizas son "desproporcionados" y a Gibraltar le pide que desarrolle "medidas legislativas para evitar el contrabando de tabaco".