El GSD, partido en la oposición de Gibraltar, se mostró ayer sorprendido de que el Gobierno haya ignorado las críticas del sindicato Unite por el tiempo que se está tomando para concluir la investigación sobre las denuncias de acoso moral contra Joanna Hernández en el Servicio de Empleo. El partido que lidera Daniel Feetham considera que las denuncias presentadas por 35 jóvenes aprendices acerca de los abusos sufridos son "muy graves" y recuerda que llegan tan sólo unos meses después de que el Gobierno promulgó una ley contra el acoso escolar. "Esto se ve cada vez más como otro de los compromisos de cáscara vacía, un truco publicitario por parte del Gobierno en lugar de un intento sincero de hacer frente a la intimidación en el trabajo".

"El hecho es que hasta ahora el Gobierno no ha logrado iniciar una investigación abierta y transparente sobre las denuncias. Como Unite asegura, no es sólo insatisfactoria la enorme cantidad de tiempo que lleva la investigación, sino también la manera en que los alumnos están siendo cuestionados. En nuestra opinión, esta falta de transparencia en un asunto de gran importancia pública".

"No es aceptable que un asunto de esta gravedad acabe cepillado debajo de la alfombra", insisten los socialdemócratas.

"La forma en que el ministro principal está tratando de mantener este asunto en secreto, contrasta fuertemente con la forma en que los GSLP-liberales se manejaron con Hernández en una causa célebre cuando estaban en la oposición", continúa un escrito del GSD.