A Fabian Picardo le ha salido el enemigo en casa. Al menos eso ha debido pensar el ministro principal del Peñón, cuando el Ministerio de Defensa gibraltareño emitiera en la mañana de ayer una nota de preocupación a la Comisión de Planificación y Desarrollo (DPC) que se reunió en la mañana de ayer para analizar los planes de desarrollo para la playa occidental y que supondría nuevos rellenos en la zona norte del aeropuerto, justo pegando a las pistas. El ministerio de Defensa que no presentó alegaciones por escrito, aseguró que dicho desarrollo podría tener un "efecto negativo" en el drenaje del agua de la pista de rodadura y afectar a la seguridad general ya que en el lugar existen unas instalaciones dedicadas al almacenamiento de oxígeno y que exigen que estén a 50 metros de cualquier otra instalación. En cualquier caso, se encargó un estudio a las autoridades aeronáuticas para una evaluación más pormenorizada de las futuras afectaciones del proyecto.

La evaluación de impacto ambiental que se ha llevado a cabo en el proyecto de recuperación, señala también que la calidad del agua podría deteriorarse aún más. Un colector de aguas pluviales en La Línea se desborda cada vez que llueve y los nuevos rellenos podrían aumentar la cantidad de tiempo necesaria para que se eliminara.

El ministro Juan Cortés, que está sentado en la DPC, señaló que la anterior administración ya había aprobado la recuperación de esta zona para un proyecto con mayor participación de la industria y un taller de reparación de yates. El Grupo de Seguridad Ambiental expresó graves preocupaciones acerca de los efectos permanentes y temporales sobre la vida marina, la calidad del agua y la pérdida de una gran masa.

El ministro Steven Linares aseguró que se tendrán en cuenta todos los aspectos necesarios para que la propuesta sea equilibrada ya que en el Peñón hay una "urgente necesidad de más instalaciones deportivas". Añadió también que los usos a los que se dedicaría el nuevo relleno, no están finalizados y un proyecto de investigación ya estaba en curso para determinar cuáles son los deportes y las necesidades de ocio más necesarias.

Por último, Cortes dijo que el Gobierno tomaría todas las medidas, pero añadió que el Ministerio de Defensa tendría que cambiar su manera de trabajar para que Gibraltar avance.

El dictamen de la DCP no es vinculante para el Ejecutivo, que puede decidir ignorar sus recomendaciones y continuar adelante con el proyecto tal y como está planteado.