Lejos del discurso optimista del Gobierno sobre la economía de Gibraltar. Así se ve el comercio minorista y mayorista del Peñón, que atisba un "futuro sombrío" que requiere, entiende, de acciones puntuales inmediatas contra una caída de ventas palpable que achaca, sobre todo, a la bajada en el número de turistas. Ésta es la principal conclusión del comunicado que la Cámara de Comercio gibraltareña acaba de hacer público en respuesta a las medidas presupuestarias anunciadas por el Gobierno en el Parlamento, que por cierto celebra.

El texto afirma que "la Cámara y sus miembros se sienten aliviados de que el gobierno mantenga su compromiso electoral de no aumentar los gastos de agua y electricidad" y "celebra también el hecho de que no ha habido un aumento en los costos de la seguridad social para los empleadores".

Después explica que ha realizado una serie de gestiones -ante el gobierno directamente a través de varios consejos asesores de los que participa- en relación a las tasas. "En general", subraya, "estas recomendaciones se orientaron a dar al sector minorista y mayorista cierto alivio después de la caída en el comercio como resultado de un menor número de turistas que llegan a Gibraltar". "La realidad es que estas empresas no tienen otra opción para comerciar en otras partes. Sus costos siguen en aumento y con la caída de las ventas a partir de un menor número de clientes, junto con la incesante presión de las ventas en línea, el futuro para las grandes extensiones de sector minorista y mayorista de Gibraltar se ve sombrío". "Al nivel macroeconómico puede que Gibraltar esté sobresaliendo pero el sector minorista y mayorista, que emplea más de 4.500 personas, sigue sufriendo". Por eso, continúa la Cámara de Comercio, "aunque las medidas en materia de tarifas anunciadas en el presupuesto son bienvenidas, la Cámara ha participado con el Gobierno y hecho otras gestiones en favor de los sectores minorista y mayorista de cara a los siguientes presupuestos".

La Cámara de Comercio aprueba "muchas de las medidas comerciales anunciadas en el presupuesto", pero desde el punto de vista empresarial no entiende por qué se ha establecido una reducción de los derechos de importación de algunos artículos pero no de otros, así como por qué hay un régimen de derechos de importación a dos niveles para algunos bienes y no en otros.

"Parece que el gobierno está gestionando los proyectos de capital con prudencia", expresa la Cámara, que se queja de que, al igual que con la administración anterior, crece cada vez más el costo del sector público así como los aumentos salariales por encima de la inflación.

"Se pregunta la Cámara si existe realmente una necesidad de pagar por encima de la inflación dado los otros beneficios de los que el sector público disfruta, como las pensiones no contributivas y en muchos departamentos la jubilación a los 55 años".

Por último la Cámara entiende que la crispación política interna no es buena. "Los gobiernos de todos los colores políticos siempre han pregonado sus valores económicos. Sin embargo, en realidad, es el sector privado el que genera más puestos de trabajo y paga la mayoría de los impuestos al gobierno. Por lo tanto, incumbe a todo gobierno administrar sus finanzas con prudencia en beneficio de todos".

"El intercambio de pullas entre el Gobierno (GSLP-Liberales) y la oposición (GSD) sobre quién hizo qué y cuánto poco hace no informa de un debate político real. Lo que sería útil para el ciudadano, para la persona de negocios y para el inversionista es tener algunos indicadores económicos robustos de común acuerdo, que se midan y se publiquen de forma regular. Nos gustaría trabajar con el gobierno y la oposición en un acuerdo sobre una serie de tales indicadores. Entonces todo el mundo sería capaz de ver cómo la economía de Gibraltar se está desarrollando de un año al siguiente", concluye el informe.