El ministro de Defensa, Pedro Morenés, avanzó ayer que el despliegue de la misión en Iraq, integrada por unos 300 militares, culminará en febrero y precisó que el equipo de adiestramiento de operaciones especiales, con un centenar de efectivos, se establecerá en Bagdad.

Morenés compareció ante la comisión de Defensa del Congreso para informar sobre la situación de las misiones españolas en el exterior, que este año han costado 616,8 millones de euros, 75 menos que en 2013.

Sobre Iraq y la aportación española a la coalición internacional contra el Estado Islámico, Morenés precisó que un equipo de adiestramiento en operaciones especiales -un centenar de efectivos- desplegará en la capital y compartirá base con americanos, alemanes, holandeses, noruegos, franceses o australianos.

El resto de los efectivos de la misión se agruparán, por una parte en otro equipo de entrenamiento y formación de capacidades, que se desplegará cerca de Bagdad -a 57 kilómetros- o en la localidad de Besmayah, algo más al sur.