La Real Balompédica viaja hoy a Marbella, para medirse al mismo rival ante el que el pasado diez de mayo cosechó una derrota por la mínima que tuvo como consecuencia directa que los albinegros se quedasen fuera de la fase de ascenso a la Liga Adelante. Un resultado que desencadenó el principio del fin de un largo ciclo de éxitos que implicó el pasado diciembre la destitución de Rafa Escobar. Los balonos buscan su segundo triunfo consecutivo -que sería el primero como visitante de Manolo Ruiz en el banquillo- en un duelo cuya previa está marcada por la designación del colegiado granadino Artacho Cobo, que pone la piel de gallina a la Balona y su entorno.

La Balona afronta hoy en Marbella el primero de dos partidos valiosos, valiosísimos, para marcar el camino por el que discurrirá lo que queda de campaña. Los albinegros visitan a un enemigo abonado al empate en casa (ocho de once) y lo hacen después de haber vencido en el Clásico, lo que siempre proporciona un plus extra de tranquilidad y autoestima.

El partido tiene un handicap extra, la designación del granadino Artacho Cobo como árbitro de la contienda. Antonio Artacho vuelve a cruzarse con la Balona después de que el 26 de enero de 2014 dirigiese un Balompédica-Córdoba B (1-2) en el Municipal y cuyas decisiones derivaron en un gravísimo incidente de orden público que acabó por costarle a la entidad de La Línea seis mil euros en multas y un apercibimiento de cierre. Como consecuencia de aquellos acontecimientos ocho aficionados albinegros fueron multados con entre 4.500 y 6.000 euros por la Comisión Antiviolencia amén de no poder acceder a recintos deportivos. Uno de ellos recibió, además, una condena de 18 meses de cárcel por un enfrentamiento con un Policía Nacional. La Balompédica ha puesto el grito en el cielo y los medios de comunicación coinciden durante la semana lo desafortunada de la designación.

Manolo Ruiz, aprovechando la escasa distancia con Marbella, desplaza a la totalidad de la plantilla, si bien es cierto que Canario es baja por lesión y que aunque no lo son oficialmente tampoco serán de la partida Diego Buitrago y Blas Álvarez. El primero, después de no haberse ejercitado en toda la semana como consecuencia de una infección en las amígdalas, lo intentó ayer, pero tuvo que abandonar el césped antes de que terminase la sesión porque se encontraba muy débil. El canterano, con una gastroenteritis, ni siquiera pudo ejercitarse ayer.

Esto quiere decir que el míster cuenta con diecisiete jugadores para este duelo, que son: Lolo Soler y Mateo (porteros); Manu Palancar, Joe, Olmo, Carlos Guerra, Javi Gallardo, Manolo León (defensas); Juampe, Zamorano, Ismael Chico, Ximo Forner, Gabriel (centrocampistas), Espinar, José Ramón, Maurí y Stoichkov.

El técnico ensayó ayer con un once muy similar al que una semana antes venció al Algeciras, con la presencia de Carlos Guerra en el eje de la retaguardia en lugar de Olmo. Es decir: Lolo Soler; Manu Palancar, Joe, Carlos Guerra, Javi Gallardo; Zamorano, Ismael Chico, Ximo Forner, Juampe; José Ramón y Espinar.

En el caso de que este último, que no acabó el entrenamiento, tenga que claudicar y sea baja, todo indica que su puesto arriba sería para Maurí, con José Ramón jugando como referente más cercano al marco y es que el míster es partidario de ir "poco a poco" con Stoichkov, por mucho que su desembarco haya levantado muchas expectativas entre los aficionados.