La Real Balompédica y la vecina población de Jimena -y de Tesorillo, que no es cuestión de herir sensibilidades- mantienen un curioso idilio a través de la portería en las últimas décadas. Diego Berenguer y Andrés Gascón defendieron el marco albinegro hace ya más de dos décadas. Pero esta semana, más que nunca, ese matrimonio quedará reflejado en el acta. La expulsión de Lolo Soler abre de nuevo la puerta de la titularidad de Francisco Javier Mateo, cuyo puesto en el banquillo será para una de las perlas de la cantera albinegra, el tesorillero David Mena.

Mateo perdió la titularidad de la que había disfrutado desde la pretemporada justo tras la derrota en Villanueva de la Serena, antes del encuentro copero con el Cádiz. Como es norma en él ni un mal gesto. Su respuesta ante estas adversidades no ha sufrido cambios: trabajo, trabajo y trabajo. "Siempre trato de entrenarme de la misma manera", recalca.

El guardavallas, que interrumpe las horas de estudio para sus inminentes exámenes para entrenarse, admite que tenía "ganas de que llegase otra vez" su momento.

"En su día asumí como profesional que soy verme fuera del equipo, fue una decisión del míster y sólo quedaba acatarlo", comenta con respeto. "Por supuesto siempre pensé que volvería a jugar, nunca me voy a rendir. No soy de bajar los brazos".

"Es igual que ahora, mi intención es volver y quedarme en el equipo titular, pero ahora lo que me preocupa es el partido del domingo con el Cacereño, ser útil y que ganemos", desliza. "Después seré el míster el que deicida. ¿Qué yo quiero jugar? Hasta los amistosos".

Mateo reflexiona en voz alta sobre el gran número de goles que recibe la Balona. "No es que lo hablemos los porteros, lo hacemos entre todo el equipo, porque cuando encajamos un gol, lo hacemos todos. Es evidente que tenemos que cortar esa racha, porque sobre todo fuera de casa nos están haciendo muchos goles, así que no queda otra que ponerse el mono de trabajo".

Por último el meta habla de la coincidencia en la portería de dos vecinos de Jimena. "Hombre, es difícil, porque tampoco es que hayamos salido muchos. En pretemporada no sabía que David [Mena] era de Tesorillo, pero está haciendo las cosas muy bien".

Por su parte el tesorillero David Mena ya fue al banquillo en la primera jornada de Liga en el partido que enfrentó a la Balona con el UCAM en el Municipal. Por entonces Lolo Soler aún estaba recuperándose de la operación a la que se sometió en verano. El cancerbero se forjó a la sombra de Diego Berenguer y el actual técnico del filial, Juan Mari Sánchez, le dio la alternativa en Primera Andaluza en el Tesorillo con sólo dieciséis años. Después, el preparador fue determinante para que se enrolase en la cantera albinegra.

David Mena cursa estudios de cuarto en el IES Azahar de San Martín de Tersorillo. Llega a casa, almuerza, y su padre le desplaza a La Línea para enfrenarse con el primer equipo. Luego vuelta a casa, estudios, cenar y a la cama. "No tengo tiempo para nada, pero si quiero ser futbolista…", dice.

"Desde luego que supone algo especial ir concentrado con la Balona, para eso estoy trabajando cada día", reconoce. "Es muy diferente a un partido del filial, por cómo se comportan los jugadores… bueno por todo".

"Si hubiese que jugar por cualquier circunstancia, se juega", comenta con tranquilidad. "Yo no sé si es verdad que soy uno de los jugadores con futuro del filial, pero lo que sí sé es que malo no es que se diga eso", reconoce.