Deportes

Y los pájaros dispararon a las escopetas

Con menos de la mitad de espectadores que vieron el pulso copero de hace poco más de un mes en ese mismo escenario, el Municipal -es decir, unas cuatro mil almas- la Balompédica reventó los pronósticos y venció al todopoderoso Cádiz que no acaba de encontrar la senda del triunfo.

El ambiente de cordialidad entre las aficiones que preside desde hace muchos años los duelos entre los dos equipos se repitió y no hubo que lamentar un solo incidente.

La finalización del encuentro fue, empero, muy diferente a la de las ocasiones precedentes. Mientras los aficionados balonos despedían en pie a sus jugadores, los cadistas la emprendían con el técnico, Antonio Calderón, al que consideran culpable de que el equipo de Carranza no sea capaz de encontrarse con la regularidad.

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