El Algeciras Club de Fútbol tiene históricamente una extraña atracción a complicarse la vida. En crear problemas donde no los hay. Tal vez por eso es más temible la relajación o el exceso de confianza que el propio rival, el CD Guadalcacín, penúltimo y con muchas e importantes bajas. El conjunto albirrojo, ese que mantiene números de vértigo, ha sufrido esta campaña dos tropiezos con conjuntos que llegaban en puesto de descenso, y es precisamente uno de estos el que hoy (17:00) rinde visita al líder de la categoría que tiene en la victoria, un deber. Porque, además, otra vez las victorias es lo mejor para mantener férreamente unidos a los pilares del algecirismo: el equipo y la afición, que esta semana ha vuelto a sufrir un zarandeo. Mere ha entendido, a pesar de los buenos resultados y de la euforia por los mismos, que el vestuario que dirige necesitaba cambiar al preparador de porteros, prescindir de David Enríquez, y colocar a Buyo, uno de su confianza. Una decisión llevada a cabo con la venia de la directiva y que ha provocado muchas opiniones contrarias y que otra vez deja enrarecido el ambiente.

Por otro lado, el Algeciras afronta el encuentro de hoy, en el que busca su séptima victoria consecutiva, sin la presencia de Víctor González, sancionado. La ausencia del central de El Viso, unido a la lesión de Berlanga, deja vía libre para el debut del canterano Pablo de Castro, un jugador que lleva ejercitándose con la primera plantilla desde el pasado curso en Segunda B y que hoy tiene la oportunidad de demostrar que puede ser uno más en el equipo. El técnico del Algeciras confirmó su titularidad en rueda de prensa: "Pablo es la primera opción, si no pasa nada queremos a ver a Pablo en acción, se lo merece, confiamos en él y pensamos que el domingo va a llegar su momento".

También dijo el técnico portuense del Algeciras que por lo demás no habrá muchos cambios con respecto a los que ganaron ante la Lebrijana. Es muy posible que Merino vuelva al lateral zurdo por Antonio Jesús para sumar rango de veteranía a una defensa en la que no estará Víctor pero sí el debutante Pablo, Álvaro Benítez -cada vez mejor- y Máiquez.

El Algeciras está ante una nueva oportunidad de seguir creciendo como equipo y, de alguna manera, continuar haciendo historia. Ha igualado una racha de seis triunfos consecutivos que en categoría nacional no los lograba desde la 82/83. Además, hoy puede sumar su decimoquinta jornada sin perder. Y, más importante que todo eso, seguir consolidándose en lo más alto y poner más tierra de por medio con sus perseguidores.

Ningún rival regala nada, y menos ante el rival a batir que siempre es el Algeciras, pero con números en la mano, el de esta tarde es de los contrarios más vulnerable. El Guadalcacín se presenta por primera vez en el al Nuevo Mirador poco menos que a dar una sorpresa y cabe esperar el partido más habitual que se está dando en La Menacha esta temporada: un equipo que lleva la posesión y la iniciativa frente a otro que juega más no perder, a protegerse en su campo. La grada también espera que pase lo más habitual, que ganen los de rojo y blanco, y que no surjan problemas donde no los hay.