Con mano de hierro, sin contemplaciones, el Algeciras Club de Fútbol se cobró ayer una nueva víctima, ahora el CD Mairena, para sumar la quinta victoria consecutiva, la tercera en su particular semana fantástica y seguir al acecho del liderato. No hay prisas. El primer puesto está a tiro de un punto y con esas maneras es sólo cuestión de tiempo. El equipo de Mere sólo necesitó medio tiempo de mucho nivel, eso sí, para dejar tocado y hundido con dos goles de Joselu a un rival con fuerzas y calidad insuficientes para llevarse algo del Nuevo Mirador, un estadio que se está convirtiendo en una sala de tortura para los rivales, que acaban reventados, desesperados, y una especie de parque de atracciones para unos algeciristas que disfrutan más de lo que sufren.

Hay que remontarse mucho tiempo atrás para ver tanta suficiencia y superioridad del Algeciras con respecto a un rival. Es lógico pensar que el equipo rojiblanco tendrá sus problemas, sus tropiezos, llegarán, pero hasta ahora los encuentros de casa los está solventando casi con un trámite burocrático. Ayer fueron tres goles pero, como ante el Alcalá, pudieron ser muchos más.

Ante un Mairena que en los últimos años era bestia negra y que no perdía en suelo algecireño desde 1991 tocaba remangarse y el Algeciras salió bien armado, con Javi Chico y Manzano en el centro, Iván en mediapunta y Joselu arriba. No hubo cambios excesivos ni extraños.

En la amplitud del Nuevo Mirador, los de Mere están en su hábitat y el rival se pasa medio partido intentando recuperar el balón y recomponerse. Poco tiempo tuvo que pasar para comenzar a notarse esa superioridad. El capitán Javi Chico, que con el balón en los pies tomó decisiones claves paradesequilibrar del duelo, estrelló una falta al larguero en el 15'. No fue la primera ocasión ni la últiva vez que los albirrojos se estrellaron con los palos. La suerte fue benévola con el Mairena.

El delantero Joselu, que no estaba ganando muchas partidas en su lucha con los centrales albinegros en balones de espalda, entre otras cosas por culpa de un árbitro cansino, estuvo eficaz en el área cuando tuvo que enfrentarse con la meta. Con el Mairena queriendo coger el sitio, Javi Chico, magistral director de orquesta, habilitó al ayer nueve que con un duro disparo y por arriba metió el 1-0 en el 25'.

Pidió perdón por su pasado mairenero pero no tuvo piedad. Ni en esta ocasión ni en la siguiente en el 32' cuando Adrián Máiquez -sobresaliente tanto en defensa como en ataque- se inventó un genial pase interior que Joselu cambió la pelota de palo con un toque de calidad. Otra vez hizo un gesto de perdón pero ya después de ajusticiarlo con dos tantos.

A partir de ahí, el dominio fue más absoluto. Para eso, Antonio Manzano es un jugador importante, arriesga poco y balancea el partido y castiga al rival. Con el marcador por delante el Algeciras es un equipo muy casi invencible. Toma el control, pasea la pelota y el rival se dedica a correr la amplitud del Nuevo Mirador y pedir a gritos el descanso cuando no el final del partido. Víctor González estrelló una preciosa volea en el larguero desde fuera del área en el 40'. El tercer balón que se fue al palo largo lo colisionó Iván, que volvió a completar un magnífico partido en la media punta, haciéndolo todo bien, asociándose de maravilla y abriendo las posibilidades en tres cuartos de campo rival.

La ovación que le dio el sabio público del Mirador a su equipo estaba más que justificada.

En la segunda mitad, los albirrojos replegaron velas en su intensidad y se dejaron llevar por la brisa favorable del marcador, que mostraba 2-0. Pudieron llegar algunos goles más que el de David Grande pero también dio una sensación de más igualdad sobre el terreno de juego.

En el 53', Marcos tuvo una ocasión para que los hombres de Eusebio Navarro acortaran distancias y cambiaran en algo el panorama del encuentro. En la primera parte, ya tuvieron acercamientos importantes a la meta de Josemi, casi todos a balón parado. El meta algecirista respondió bien al poco trabajo que tuvo.

Luego, el colegiado José Crispín Mayorga no quiso ver un claro penalti a Gabri. Tomó decisiones extrañas el árbitro malagueño, casi todas erróneas y la mayoría en contra de los intereses locales. Parece que se toma por costumbre obviar penaltis a favor de los algeciristas ante la superioridad y la claridad del marcador. Ya pasó ante el Alcalá y se repitió ayer. Malos árbitros los que están visitando el estadio algecireño.

David Grande, uno de los cambios, entró con ganas de igualar la buena mano de su compañero y competidor por el nueve. Joselu se lo puso complicado. Desaprovechó un excelente pase de Iván para hacer el tercero de la tarde pero mató en la segunda ocasión que tuvo. Grande ganó en carrera en defensa, le sacó una ventaja tramenda para encarar a Cobaleda y picarle el balón sutilmente al meta del Mairena y hacer el 3-0.

El Algeciras cerró de esta manera un gran partido, una gran semana, un ciclo de cinco victorias seguidas y va a por la sexta velocidad.

Josemi

Máiquez

Merino

Benítez

Victor González

Manzano

Javi Chico

(Mario, 71')

Gabri

Melchor (Willy, 83') s.c.

Iván

Joselu (Grande, 62') Cobaleda

Jaime (Romero, 69') s.c.

Álvarez (Romero, 75') s.c.

Adri Pavón

Juanma

Baraja

Óscar Reina

Víctor Gago

Marcos

José Carlos

Óscar (Javi Guerra, 42')

Árbitro: Mayorga Ruiz (Málaga). Fatal, tomó decisiones incomprensibles en contra del Algeciras. Amonestó al local Merino y a los visitantes Óscar, Óscar Reina, Adri Pavón, Jose Romero y Baraja. Goles: 1-0 (25') Joselu. 2-0 (32') Joselu. 3-0 (90') David Grande. Incidencias: Encuentro de la sexta jornada de Liga en el grupo X de Tercera división disputado en el Nuevo Mirador ante unos 1.300 seguidores.