Un Marbella Fútbol Club con presupuesto millonario será el rival de la Real Balompédica en el partido único de la primera eliminatoria de la Copa del Rey 2014-15, según deparó ayer el sorteo que la Real Federación Española llevó a cabo en la Ciudad del Fútbol de Las Rozas, en Madrid. El duelo se jugará el próximo tres de septiembre en el Municipal de la ciudad costasoleña. El vencedor se medirá el diez de septiembre, actuando como local, al Fuenlabrada madrileño, que resultó exento en la primera ronda. Balona y Marbella volverán a verse las caras el 21 de diciembre en partido del grupo IV de la Segunda B.

La Real Balompédica comenzará el próximo tres de septiembre su cuarta andadura consecutiva en la Copa del Rey. Un hecho casi inédito en la centenaria historia del club albinegro, que además tiene el atractivo añadido de participar en la primera edición en la que el trofeo será entregado por Felipe VI.

El rival en la primera ronda será el Marbella FC, que llega procedente de la Tercera división y que no se mide al conjunto de La Línea desde la 2008-09, en un partido en el que los de La Línea se despedían de la Segunda B y los malagueños se clasificaban para la fase de ascenso. Los marbellíes han recibido de buen grado el resultado del sorteo, porque entienden que dada la trascendencia del choque serán muchos los aficionados linenses que se desplazarán hasta su estadio, lo que no sólo se traduce en un ambiente nada habitual en aquella instalación.

El conjunto marbellí está dirigido por un viejo conocido de la comarca, Jaime Molina (ex de la Unión), que fue el responsable del ascenso a la categoría de bronce, que tiene entre sus discípulos a Añón (ex también del conjunto barreño) y al meta Reina (que defendió los intereses del Algeciras).

A pesar de tratarse de un recién ascendido, el Marbella ha desembarcado en Segunda B con intención de hacer algo grande y para ello ha confeccionado un presupuesto de nada menos que un millón de euros, bastante más del doble que el que maneja la directiva de Alfredo Gallardo. Bien es cierto que parte de esa cantidad está destinada a ampliar las mejoras en un estadio que ya sufrió una importante metamorfosis la pasada campaña, en la que fueron instaladas sillas de plástico en la grada de preferencia. El club, además, tiene previsto adquirir un marcador electrónico de grandes dimensiones que será instalado en breve en el fondo norte.

Detrás de ese proyecto se encuentra el magnate ruso Alexander Grinberg, quien en una entrevista que publicaba ayer el diario As aseguraba que siguiendo el modelo del Éibar está decidido a hacer "un Marbella muy grande" y que el primer paso por llevarlo a la Liga Adelante cuanto antes.

Grinberg defiende que su entidad cuenta ahora, después de un año de trabajo con "una estructura muy buena con gente muy profesional" y vaticina que el público, siempre tan remiso a respaldar a su equipo, lo hará esta temporada atraído por "un fútbol bonito e interesante".

Por su parte el preparador balono, Rafa Escobar recalcó que su equipo afrontará el torneo el KO "con muchísimo interés" y aunque observa como aspecto positivo la cercanía del desplazamiento "porque eso nos garantiza que estaremos respaldados por nuestro público" desliza también que el duelo está cargado de dificultad "porque el Marbella está haciendo un gran equipo, ya que los nuevos gestores del club están haciendo un enorme esfuerzo económico, pero eso no va a limitar en lo más mínimo nuestra ilusión".