"Se está formando un buen grupo y vamos a tener muchas opciones de hacer algo bonito". Es la carta de presentación de Xavi Vallmajó, nuevo base del Villa, que desembarca en Los Barrios con el espíritu que ha encarnado al vestuario gualdiverde en las dos últimas temporadas: ilusión y ganas de ponerse el mono de trabajo.

Xavier Vallmajó Tercero, nacido en Barcelona el 19 de febrero de 1975, selló su fichaje por el Villa el pasado lunes y reconoce que la oferta de los barreños le llenó en todos los aspectos.

"Estoy muy contento porque se está configurando un gran equipo, con un grupo de personas a las que conozco bastante bien, y porque además el club ofrece una estabilidad económica, algo que en los tiempos que corren no es muy común", señaló.

El base admite que le agrada "volver a estar a las órdenes de Moncho Fernández". "Coincidimos en Gijón hace unos años y es un entrenador que apuesta por el trabajo duro", destacó Vallmajó, que también recibió referencias de su hermano Jordi, también base y también con pasado en las filas de Los Barrios. "Quizás a él no le fue todo lo bien que le podría haber ido en lo deportivo, pero me habló genial del club y de la gente del pueblo".

Vallmajó es junto a Eric Sánchez -el otro base fichado- el hombre llamado a ocupar el puesto de director de orquesta que ha dejado vacante el adiós de Pedro Rivero (al Cajasol de la ACB).

"Mi intención no es hacer olvidar a Pedro Rivero, sino ayudar a que el equipo gane partidos", afirmó rotundo. "Es cierto que Pedro viene de hacer una gran temporada con unos números muy buenos, pero yo tengo otra forma de jugar. No soy tan anotador, me gusta más dirigir y aportar con otro estilo de juego", explicó Xavi.

El nuevo base gualdiverde, de 33 años, llega a la Villa barreña con una dilatada experiencia ACB (Valvi y Casademont Girona) y LEB (Gijón, Palma Aqua Mágica, Lleida y Melilla la pasada campaña). Se convierte en el quinto refuerzo tras las incorporaciones de Levi Rost, Jesús Castro, Eric Sánchez y Antxón Iturbe, compañero también en Melilla y Gijón. A ellos hay que unir la continuidad del capitán, Jesús Chagoyen, y del alero Alejandro Alba.

Vallmajó entiende que el marcado carácter nacional de la plantilla es un punto a favor. "Es fundamental que en el vestuario se cree una unidad y se haga causa común en cuanto a sacrificio. Cada año todos los equipos pasan por algún bache, todos -subrayó-, y es en esos malos momentos cuando la unidad del equipo ayuda a superar la crisis", reseñó.

Lo que Xavi Vallmajó tiene claro es que el Villa de Los Barrios puede seguir en la línea "de las dos últimas temporadas". "Una Liga es muy larga, larguísima, pero con este grupo que se está formando estoy seguro de que vamos a tener muchas opciones y podemos dar un paso adelante", sentenció.

El barcelonés prefiere no hablar de roles hasta que comience el trabajo, aunque reconoce que va a haber mucha competencia en el plantel de Moncho. "Seguro que Eric me lo querrá poner muy difícil, pero yo también lo voy a hacer", apostilló.