El presidente de la Real Balompédica, Alfredo Gallardo, estalló ayer al término del encuentro de vuelta que su equipo disputó en Tenerife, en el que resultó derrotado por 3-2 y, por consiguiente, eliminado de la fase de ascenso a la Liga Adelante. El mandatario balono no tiene dudas de que en el cúmulo de errores que cometió Aitor Gorostegui Fernández Ortega en contra de la escuadra albinegra no obedecen a una casualidad y arremetió no sólo contra el propio interesado, sino contra la Federación, a la que considera cómplice y responsable de lo que calificó como "un atraco".

Gallardo se mostró convencido de que Gorostegui Fernández cambió de actitud tras escuchar "gritos de puta España", algo que, recalcó, no esperaba oír en suelo canario. "A lo mejor como es vasco le gustó eso de puta España y se puso del lado del Tenerife".

"A él le gustó ese grito, como vasco le hizo llenarse de orgullo y entonces fue cuando decidió acabar con los españoles", abundó en referencia a la Real Balompédica.

"Dan ganas de dejarlo todo, pero no sólo a mí, sino a los jugadores, a todos... porque este robo del árbitro ha sido lamentable, porque ha sido muy claro, tanto que en el palco eran varias las autoridades canarias que me han reconocido que había sido penalti clarísimo y cuando me preguntan por qué no lo pitó sólo se me ocurre una respuesta: porque quería que ganase el Tenerife", razonó.

"Al partido España-Italia de la Eurocopa estoy seguro que acudieron muchos federativos españoles y comerían lo mejor de lo mejor y estarían todos muy cómodos en el palco, con su chaquetita, mientras que ignoran lo que está sucediendo en el fútbol español, cosas como las que le han pasado a la Balona en esta eliminatoria, que con un presupuesto de 400.000 euros ha venido a jugarse la vida a un campo como el del Tenerife, donde se permite que un árbitro nos robe, nos atraque y nos eche de la competición, jugando con los sentimientos de una afición, de toda una ciudad, de gente muy humilde que había hecho un gran esfuerzo para poder viajar con el equipo y que venían dispuestas a ver un partido de fútbol y no a presenciar un atraco", dijo, visiblemente indignado con lo que había sucedido sobre el terreno de juego del Heliodoro Rodríguez López.

"En vez de pasearse tanto deberían estar más atentos a todo lo que sucede en estas categorías, porque por desgracia no es la primera vez que nos sucede a nosotros [en clara referencia a la eliminatoria de ascenso a Segunda B que midió a los linenses con el Granada] y como le sucede tantas veces a los equipos humildes y todo sucede porque la mayoría de ellos [los federativos] son unos golfos deportivos, porque no se preocupan de lo que sucede en el fútbol español y sólo están con las grandezas de la selección".

Alfredo Gallardo lamentó que una temporada "magnífica" deje este mal sabor de boca. "Si nos hubiesen ganado en buena lid... pero la eliminatoria era para la Balona, el árbitro se dio cuenta y tomó partido".

"No tengo un solo reproche que hacer a mis futbolistas ni a mi entrenador, de los que me siento orgulloso", sentenció.