Provincia de Cádiz

Cádiz vive la huelga con menor seguimiento y más movilización

  • La jornada de paro tuvo un respaldo multitudinario en las grandes industrias y los transportes pero más escaso de lo esperado en el comercio y los servicios públicos · No hubo incidentes de relevancia

La tercera huelga general en poco más de dos años se vivió ayer en la provincia de Cádiz de manera muy  similar a las dos anteriores. Es como si la sociedad gaditana haya memorizado ya a la perfección el manual de los paros generales y lo llevara a la práctica una y otra vez con escasas variaciones. Porque la de ayer no fue, evidentemente, una jornada laboral al uso pero tampoco sirvió para paralizar la vita cotidiana de los gaditanos.

 

Si acaso, la diferencia de ayer estribó en que el seguimiento de la huelga fue, en el conjunto de la provincia, levemente inferior a la del pasado 29 de marzo aunque, por el contrario, registró una movilización bastante mayor en las diferentes manifestaciones organizadas por las centrales sindicales en las principales localidades gaditanas. Y, como en ocasiones anteriores, los incidentes, que los hubo, no adquirieron una gravedad especial, quizás por la amplia presencia policial registrada.

 

Lejos de la habitual guerra de cifras -los sindicatos hablaban ayer de un "éxito total" y la patronal resaltaba la "escasa participación" en el paro- lo cierto es que la influencia de la huelga general volvió a ser muy dispar, tanto por sectores económicos como por horarios. Así, el paro fue prácticamente total en los centros industriales que aún siguen funcionando en la Bahía de Cádiz y en el Campo de Gibraltar y también en los transportes, las lonjas, los mercados y los puertos de Cádiz y Algeciras, pero tuvo un seguimiento inferior a lo esperado en otros sectores como el de la enseñanza (se ausentaron muchos alumnos pero no tanto el profesorado), el funcionariado de las diferentes administraciones (sobre todo en los ayuntamientos), los servicios públicos y los polígonos industriales, donde muchas empresas funcionaron a puerta cerrada.

 

Menciones especiales merecen el sector del comercio o el de la hostelería, que funcionaron a cuentagotas durante la mañana -muchos de ellos cerraban cuando llegaban los piquetes y volvían a abrir en cuanto se marchaban- pero que recuperaron una normalidad casi absoluta pasadas las 14 horas. A destacar que, a diferencia de ocasiones anteriores, el grueso de las grandes cadenas comerciales funcionó sin apenas sobresaltos.     

 

En la ciudad de Cádiz la noticia estuvo en la masiva presencia de ciudadanos a la manifestación que recorrió la Avenida -más de 20.000 personas- y en el descomunal despliegue policial motivado por los preparativos de la Cumbre Iberoamericana que arranca mañana. A destacar que el sector del taxi, por lo general, no secundara el paro, y que los centros comerciales más importantes de la ciudad -con El Corte Inglés a la cabeza-  funcionaran con normalidad. A la misma hora que se celebraba la manifestación de Cádiz se vivía otra igualmente multitudinaria en Jerez, donde se reunieron unas 20.000 personas según los sindicatos y 4.000 personas según la Policía.  

 

En San Fernando el centro comercial de Bahía Sur fue uno de los objetivos de los piquetes. Allí se concentraron poco antes de las diez de la mañana para evitar que el complejo abriera sus puertas. Incluso improvisaron una barricada con carritos de la compra que colocaron en el acceso al recinto, lo que dificultó el tránsito de los vehículos. Bahía Sur optó por hacer exactamente lo mismo que en ocasiones anteriores: echar la baraja y cerrar los accesos mientras que el piquete estuviera presente para luego, mediada ya la jornada, abrir sus puertas al público. Pero esta vez no se lo pusieron fácil y el piquete optó por permanecer en el centro comercial hasta bien entrado el mediodía, retrasando así los planes del complejo. Hubo incluso algún que otro incidente espóradico entre el piquete y unos clientes.

En el centro de La Isla un destacado número de establecimientos comerciales que a primeras horas de la mañana recelaba de lo que podía ocurrir optó finalmente por abrir sus puertas. También abrieron con normalidad los supermercados de las grandes cadenas, si bien el seguimiento de la huelga fue masivo en el polígono industrial de Fadricas y en Navantia.

 

La jornada de huelga en El Puerto transcurrió sin incidentes dignos de mención. El seguimiento fue especialmente amplio en sectores como la industria o la educación, con muy pocos alumnos en las aulas, mientras que en el Ayuntamiento el seguimiento del paro se cifró en un 30%. Prácticamente todas las dependencias municipales estuvieron abiertas, salvo el Mercado de Abastos. En el sector del comercio, como suele ser habitual, el seguimiento fue desigual y estuvo muy marcado por la presencia de los piquetes. El centro comercial El Paseo abrió sus puertas con algo de retraso y con una fuerte presencia policial, aunque no abundaron los clientes, al menos durante la mañana. A destacar la manifestación convocada por los sindicatos a las doce y media desde la plaza del Polvorista, que sumó cerca de 4.000 personas en lo que se convirtió en una de las mayores marchas que se recuerdan en El Puerto.

 

En Chiclana hubo un buen número de comercios que permanecieron abiertos, al igual que los grandes establecimientos de alimentación, si bien el Mercado Central cerró sus puertas. No obstante, hubo tiendas del centro y los situados en Urbisur que se sumaron a la jornada de paro con el cierre de sus establecimientos, al igual que algunas ventas del extraradio. Los autobuses se acogieron a los servicios mínimos, mientras que en institutos y colegios sí se notó la ausencia del alumnado. Gasolineras, estancos y farmacias abrieron, aunque la gran mayoría de las entidades bancarias no prestaron servicio al público. Alrededor de medio millar de manifestantes recorrieron las calles céntricas de la ciudad para protestar contra los recortes y la reforma laboral del Gobierno.

 

En Puerto Real, la primera cita de los piquetes volvió a ser en los accesos al polígono del Río San Pedro, en las entradas a las factorías de Matagorda, Dragados, el muelle de la Cabezuela y las empresas de la zona. Desde las 5:00 horas se concentraron allí, sin que se produjeran incidentes señalables más allá de los habituales incendios de maderas y neumáticos a modo de barricada, algo que se prolongó hasta que los piquetes abandonaron el lugar para acudir a la manifestación de Cádiz.

Tampoco se produjeron incidentes esta vez en los dos establecimientos de Mercadona, como sí ocurriera en el anterior paro. En el centro de la ciudad sí se produjo un altercado: el intento de rotura del escaparate de la oficina de Unicaja de la calle de la Plaza que, curiosamente, estaba cerrada por la huelga. El cristal blindado soportó el lanzamiento de piedras.

 

En la Sierra, destacó la manifestación vivida por la mañana en Arcos y que congregó a unas 800 personas, mientras que en el Campo de Gibraltar llamó la atención sobre todo que el puerto de Algeciras cerrara totalmente durante toda la jornada, decidiendo incluso Acciona Trasmediterránea suspender las cuatro rotaciones previstas en la línea entre Ceuta y Algeciras.

Información realizada por Francisco Sánchez Zambrano, Arturo Rivera, Teresa Almendros, Fernando Melero, José Luis Porquicho, Ana Villegas y Elena Correa.

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