Ciencia y Sociedad

Gaucín, la bella atalaya del Campo de GibraltarEl clásico y determinante anticiclón de las Azores

  • l Gaucín, uno de los más bellos y pintorescos pueblos de la Serranía de Ronda, tiene mucha historia y monumentos que la atestiguan. Destaca su castillo El Águila, una estratégica atalaya

En los días de viento de Poniente, libre la Bahía de Algeciras de nubes y brumas, desde el blanco pueblo andaluz de Gaucín, enclavado en una de las culminaciones paisajísticas de la Serranía de Ronda, se divisa la embocadura oriental del Estrecho de Gibraltar, Ceuta, las montañas del norte de Marruecos, el enhiesto Peñón de Gibraltar, la hermosa Bahía de Algeciras con las sierras que la enmarcan, y casi todas las localidades de la comarca.

Gaucín, atalaya privilegiada del Campo de Gibraltar, al que podría pertenecer por razones de proximidad (65 kilómetros desde Algeciras), debido a las penalidades y riesgos del camino ha permanecido aislada durante muchos siglos; incluso ahora no es visitada como merece. Tal era de pésimo el camino de herradura que a finales del siglo XVIII el viaje de Algeciras a Ronda, que ahora, por ferrocarril o carretera, dura unas dos horas, en aquellos tiempos requería dos fechas, a caballo o en traqueteantes carruajes a mitad del camino se hacía de noche y al llegar al pueblo de Gaucín se hacía obligada la parada y fonda. Aquel fue el origen de algunas posadas y de un hotel para viajeros que se llamó entonces Hotel Inglés, ya desaparecido, del que se guarda un curioso libro de visitas, testimonial del paso de viajeros, algunos ilustres y famosos y en su mayoría ingleses, que han dejado menciones de las condiciones del viaje, del miedo a los bandoleros de la Serranía de Ronda, felices de superar la romántica aventura que entonces suponía el viajar.

Este hermoso y acogedor pueblo de sugestivo paisaje urbano tiene mucha historia y monumentos que lo atestiguan. Destaca el castillo, una impresionante y estratégica atalaya defensiva llamada El Águila, pues nido de tal soberbia ave parece ser, situado sobre un picacho rocoso de 688 metros de altura sobre el nivel del mar. Gaucín fue conquistada por los cristianos a los musulmanes en 1485, en las postrimerías de la Reconquista. En 1842 el castillo albergaba a 40 soldados y 6 cañones, pero en 1843 el polvorín explotó causando graves destrozos. En tiempos recientes se han realizado importantes obras de acceso que permiten al visitante la oportunidad de rememorar viejas historias y otear tierras y mares de lejanos horizontes.

En el recinto del castillo se encuentra una amplia ermita con bóvedas de bellas yeserías. En ella se venera una imagen minúscula pero enorme por la gran devoción que despierta en los gaucileños, la del Niño Jesús de Gaucín. La iglesia, erigida en 1487, ofrece un aspecto monumental. En un lateral de la plaza se encuentra una bella fuente, llamada de Los Seis Caños, del 1628.

La falta de terreno llano en tan agreste lugar no ha impedido que acá y allá, por mínimo que sea, haya algún jardín o arbolado, haciendo más gratos los estratégicos miradores en los bordes del entramado de calles que conservan el mismo trazado de remotas épocas históricas. Gaucín, uno de los más bellos pueblos serranos, coronado por el castillo El Águila y mirador privilegiado del Campo de Gibraltar y el Estrecho, tiene merecimientos sobrados para recibir más visitas, hoy día con el cómodo viaje de una hora.

Sus empinadas calles no son obstáculo apreciable para perderse el disfrute de tan bello y acogedor pueblo con el reconfortante silencio de sus calles, insólito en las ciudades y, como corresponde a un pueblo serrano, la típica y sustanciosa gastronomía.

FUENTE: el libro "Gaucín", de los hermanos Francisco y Esteban García Mota.

S. T. Coleridge "Algunos hombres son como los vasos de cristal sonoro, para que produzcan sus mejores sonidos deben estar mojados".

Anónimo "Experiencia es el nombre que le damos a nuestras meteduras de pata".

Séneca "Muchas veces es valor conservar la vida".

S. Pellico "Lo que importa no es poseer un mérito premiado por la sociedad, sino hacerse acreedor al mérito; aunque no lo recompensen, puede seguir creciendo".

Bertrand Russell "¿Para qué repetir errores antiguos habiendo tantos errores nuevos que cometer?".

Anónimo "Muchas personas no cumplen los ochenta porque intentan durante demasiado tiempo quedarse en los cuarenta!"

Ernesto Sábato "La vida sólo puede ser comprendida mirando para atrás; más sólo puede ser vivida mirando para adelante".

V. Foscolo "Para hacernos honorables en el mundo y para tranquilizar nuestra propia conciencia, confiamos más en los vicios ajenos que en las virtudes propias".

E. Glasgow "No todo cambio es crecimiento. como no todo movimiento es progreso".

Molière "Nunca se entra, por la violencia, dentro de un corazón".

ESPACIOS DE TIEMPO:

Ahora poco.- Ahora mismo // Hace un momento. Ande.- Desde cuándo; "¿Ande cuando sois novios?". Antié.- Anteayer. Antiguacho/a.- Muy antiguo/a. Antigüísimo.- Muy antiguo. Año de la pera y, año de la riá (de la riada).- Muy viejo, de hace muchos años. Chamá.- Espacio de tiempo en el que ocurren varias desgracias. Clamaílla.- Espacio corto de tiempo. Chaspón.- "De chaspón", fugazmente // De refilón. Chispa.- Periodo corto de tiempo. Claro.- "Hacer un claro", buscar tiempo para algo. Con la misma.- Enseguida. Cuatriantié.- Hace cuatro días. Demientras.- Mientras.- Enantes.- Antes. Encajarse.- Llegar a un sitio en poco tiempo: "Se encajó allí en dos minutos". Endenante.- Antes // Hace un momento. Entoavía.- Todavía. Mañaneo.- Conjunto de actividades y tareas que se realizan por la mañana. Mismítico.- Mismísimo: "Ahora mismítico recoges lo que has tirado". Olla.- "Hay más días que olla", hay tiempo de sobra.

TIEMPO METEOROLÓGICO:

Nortá.- Viento del norte. Orilla.- "Hacer buena (o mala) orilla", hacer buen o mal tiempo atmosférico. Pardear.- Anochecer. Pegajoso.- "El tiempo está pegajoso", estar este bochornoso, caluroso y húmedo, imposibilitando la evaporación del sudor. Pelona o pelúa.- Helada muy fuerte. Poniente.- Viento fuerte de poniente (del oeste). Rociá.- Rocío. Solano.- Viento de levante (del este). Surbajo.- Viento del suroeste en la zona del Estrecho de Gibraltar. Taró.- Banco de niebla o neblina sobre el mar. Terral o terrero.- Viento del norte en verano, muy caluroso y seco, en la provincia de Málaga y el Campo de Gibraltar. Venía.- Avenida, riada o inundación. Ventazo.- Viento fuerte.

El ciclón de las Islas Azores, constituido por muchos millones de kilómetros cúbicos de aire con alta presión relativa, es el obstáculo que suele estacionarse al oeste de nuestra península y bloquear el paso de las borrascas atlánticas y empujándolas hacia la costa cantábrica y los Pirineos; dejando si acaso algunas lluvias en el tercio norte del país, mientras que al resto sólo llegan nubes estériles e intensos vientos de su fleco inferior.

Las borrascas o bajas presiones son otras enormes células de aire en las que las nubes son empujadas hacia arriba enfriándolas, lo que propicia la lluvia. Los anticiclones o altas presiones se comportan de forma contraria: empujan las nubes hacia abajo, donde van encontrando crecientes temperaturas y normalmente no llueve. Además, borrascas y anticiclones se "devoran" entre sí eternamente, luchando por prevalecer.

El dichoso anticiclón de las Azores, mientras que ocasionalmente no se disipe o se desplace hacia el norte o el sur, es el árbitro inapelable del tiempo meteorológico de España y Portugal, sobre todo en la mitad meridional; es el responsable de los años de sequía, a veces de dos o tres consecutivos, mermando el caudal de los ríos y las reservas de los embalses. Y lo peor es que descreídos por la ciencia-, hemos dejado de tener la esperanza de ablandarlo con plegarias.

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