El Ayuntamiento de Algeciras acaba de culminar la impresión de la guía de mano con toda la información sobre la ruta turística Paco de Lucía. El folleto en el que se recoge la, para empezar, decena de enclaves que se recomienda visitar va a ser repartido desde ya en hoteles, agencias de viajes, etcétera. El alcalde, José Ignacio Landaluce, lo presentó anoche en el hotel Reina Cristina, acompañado, entre otros, por Pepe de Lucía.

Landaluce, durante su intervención, leyó un fragmento de un artículo de Félix Grande en el que el autor, en resumen, sostuvo que Paco de Lucía anhelaba estar rodeado por la autenticidad de los orígenes y, por ende, esa Algeciras que intenta recoger la ruta creada. La lectura tocó a Pepe de Lucía, que tomó luego la palabra y confesó que hace justo un año su hermano Paco, con motivo de su concierto en el festival Starlite de Marbella, estuvo en la ciudad, y lo hizo para "elegir su lecho de muerte".

Lo que relató Pepe de Lucía impresionó a los presentes. Y afianzó lo que se respiró ayer en el Cristina, el fuerte vínculo entre Paco de Lucía y la tierra que lo vio nacer y lo ve reposar. Ese vínculo, cómo se creó, dónde, es lo que propone construir la guía, que también se distribuirá en las delegaciones municipales y se podrá consultar en la web del Ayuntamiento. En breve, según indicó Landaluce, las paradas de la ruta serán debidamente señalizadas con paneles explicativos. Susana Pérez Custodio, edil de Turismo, agregó que cada vez son más las personas que se interesan por el itinerario.

En realidad lo que se iba a presentar (se aprovechó la ocasión para que fuera conjunto) y, de hecho, se dio a conocer ayer en el hotel Reina Cristina es la presencia de Algeciras en otra ruta, también turística, con componentes culturales y, en este caso, también históricos, la de los viajeros románticos. Esto es, el camino de Gibraltar hasta Ronda por la serranía que aquellos visitantes del siglo XIX dieron a conocer al mundo.

En esta ruta se lleva trabajando un año y se pondrá en marcha, según se espera, en otoño. Se ha diseñado para que pueda hacerse a caballo, en tren y en modo senderista.

Participa en la creación de este trayecto el etnógrafo y escritor Isidro García. Ayer contó lo que para él es romanticismo. Contó que hace la ruta con su burra y que ayer le pidió a los guardas de Sotogrande que le dejaran entrar con el animal porque quería bañarse en la desembocadura del río Guadiaro. Era, contó, muy importante para él, impresionado con su nacimiento allá arriba. Y entró con la burra y se bañó, según contó.