Algeciras

Siguiendo las pautas clasicistas

  • El pleno municipal acordó el pasado año solicitar la inclusión de este edificio en el Catálogo General del Patrimonio Histórico Andaluz. En 1956 el arquitecto Manuel Blázquez realizó la reforma de fachada e interiores

El Ayuntamiento de Algeciras sigue teniendo en mente la rehabilitación del antiguo edificio del Gobierno Militar, ubicado en la céntrica plaza del General Martí Barroso, para acoger en su interior el Museo de la ciudad, que dispondría además de un espacio dedicado a la historia militar de Algeciras y del Campo de Gibraltar. Un edificio emblemático, para el que hay solicitada, según acuerdo del pleno municipal de julio de 2011, la inclusión en el Catálogo General del Patrimonio Histórico Andaluz.

Una iniciativa que aplaudió en su día La Trocha, quien aportó un informe a la comisión municipal de Patrimonio sobre el valor arquitectónico del edificio.

Las gestiones para la cesión al Ayuntamiento por parte de la Dirección General de Infraestructuras del Ministerio de Defensa, siguen adelante, según destacó a este diario el delegado municipal de Patrimonio, Diego González de la Torre. Por su ubicación estratégica, incorporar una actividad cultural a un edificio totalmente cerrado puede aportar una mayor actividad, a su vez, a una zona baja de la ciudad ya de por sí deteriorada, según añadió González de la Torre.

Se trata de un inmueble de dos plantas asentado sobre una parcela de 1.035 metros cuadrados. En 1872, el inmueble pasó a convertirse en sede de la Comandancia General del Campo de Gibraltar, tras unas obras realizadas por el maestro mayor Juan Carrasco y Tenorio. En 1956, las autoridades militares encargaron al arquitecto civil Manuel Blázquez García, siendo ingeniero jefe de la obra Francisco Echenique Gómez, las reformas de la fachada y del interior.

La actuación se limitó a la eliminación de parte del apretinado de la fachada de fábrica de ladrillos, levantamiento de un zócalo de piedra artificial, picado de las pilastras formadas por aplacados de ladrillos, nueva cerrajería en los huecos de balcón y cierros de madera en fachada.

El edificio, desde entonces, es un ejemplo de la arquitectura de los años 50 del pasado siglo y, según destacó la asociación cultural La Trocha, al igual que otros edificios como la Aduana, la antigua cárcel de La Piñera o Correos, intentan imitar el clasicismo, dando ciertos tintes locales.

La creación de la Comandancia General del Campo de Gibraltar, con cabecera en San Roque, tuvo lugar en 1723 tras la cesión de Gibraltar a Gran Bretaña por el Tratado de Utrecht, en 1713. Dicha Comandancia comprendía 27 pueblos y no dependía de la Capitanía General de Sevilla. En San Roque permaneció hasta 1804, fecha en la que el comandante general del Campo de Gibraltar, el general Castaños, la trasladó a Algeciras. En 1815 se modifican los límites de la jurisdicción y se retira la autonomía de que disfrutaba. En 1877, las fuerzas militares bajo el mando del comandante general del Campo de Gibraltar asumen funciones de persecución del fraude y lucha contra el contrabando, estableciéndose una dependencia del Ministerio de Hacienda. También se le atribuyen funciones de orden público y vigilancia.

La Comandancia Militar se transformó en Gobierno Militar del Campo de Gibraltar con motivo de la reorganización del Ejército, en 1904. A lo largo del siglo XX, el gobernador militar adquirió nuevas atribuciones civiles: vigilancia de la comunicación con Gibraltar, protección de menores y escolar y Plan de Desarrollo Económico Social del Campo de Gibraltar (1965).

Ya en 2005, el Gobierno Militar dejó de tener las escasas competencias que tenía por entonces. Gracias a las gestiones realizadas, entre ellas la del senador del PSOE José Carracao, no desaparece la figura, aunque el cargo, ahora lo ostenta, un coronel destinado en San Fernando, el comandante militar de Cádiz.

Los orígenes para negociar el traspaso de este edificio al Ayuntamiento se remontan a 2006, cuando el alcalde, Tomás Herrera, remite un escrito al coordinador de la Administración General del Estado instándole a iniciar contactos con Defensa. Desde ahí, han sido numerosas las gestiones realizadas, llegándose a un acuerdo, en el que también se incluyen otras instalaciones militares, para adquirir dicho edificio.

Mientras, el Gobierno Militar se trasladó en 2009 a la residencia del Fuerte Santiago, tras unas obras de reforma, para establecerse de manera definitiva allí.

En julio de 2001, el alcalde, José Ignacio Landaluce, mantuvo en Madrid una reunión de trabajo con la directora de Infraestructuras de Defensa, entonces Mónica Melle.

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