La ciudad de Algeciras y su puerto han sido nuevamente señalados como enclaves indispensables en la mejora de las conexiones ferroviarias españolas. Un centenar de representantes institucionales y empresariales, entre ellos representantes de 16 cámaras de comercio desde Algeciras al límite con Francia en el País Vasco, exigieron ayer en Burgos la ejecución del corredor ferroviario que tiene en la Algeciras-Bobadilla su cabecera.

Las cámaras de comercio remitirán un documento al Ministerio de Fomento en el que reclaman la apertura completa del corredor de sur a norte, según detalló el presidente de la Cámara de Comercio de Burgos y anfitrión de la reunión, Antonio Miguel Méndez Pozo. La comarca estuvo representada por los presidentes de la Cámara de Comercio del Campo de Gibraltar y del Puerto Bahía de Algeciras, Carlos Fenoy y Manuel Morón.

La demanda de las cámaras de comercio implica la electrificación del tramo de 176 kilómetros entre Algeciras y Bobadilla y la reapertura del tren directo Madrid-Aranda de Duero-Burgos, que acortaría unos 100 kilómetros el recorrido actual que se desvía por Valladolid y Ávila.

El presidente de la Cámara de Comercio de Burgos recalcó que representantes camerales del corredor ferroviario han mantenido ya contactos con cinco comunidades autónomas, cuyos consejeros de Fomento trabajan ya en favor de este trazado. Méndez Pozo aseguró que esos contactos se han materializado ya con los gobiernos de Madrid, País Vasco, Castilla y León, Castilla-La Mancha y Andalucía, aunque afirmó que también han percibido cierto interés por esta iniciativa por parte del gobierno de Extremadura.

Entre las aportaciones de la cumbre de ayer destacaron las de los presidentes de los puertos de Algeciras, Pasaia (Gipuzkoa) y Bilbao. El presidente del Puerto de Algeciras, Manuel Morón, recalcó que al no contar con una línea ferroviaria adecuada, el puerto se ve obligado a realizar buena parte de su transporte por carretera. Y para ello puso el ejemplo de que cada 46 segundos sale o entra en Campo de Gibraltar un camión cargado de mercancías, por lo que abogó por completar la infraestructura para permitir una mayor capacidad de penetración hacia el interior y elevar el tráfico de importación y exportación.