El Llano Amarillo está considerado por la Policía Local como uno de los puntos negros en cuanto a abandonos de coches. Se convierte en un lugar idóneo por su cercanía con la estación marítima. También existe otra concentración en la calle Juan de la Cierva por estar cerca de la estación de autobuses. Por ejemplo de las 32 actas abiertas que hay ahora, nueve se sitúan en el Llano. Y de las nueve, siete son coches de procedencia extranjera.

Los hay que dejan su automóvil porque ya no lo utilizan y no terminan de darlo de baja. Es la manera más fácil de deshacerse de ellos, otros tienen una procedencia dudosa. Todos al final, tarde o temprano, terminan retirados.

Los indigentes han aprovechado la afluencia de estos transportes para encontrar cobijo durante las noches. Lo que suelen hacer es forzarlo para entrar y se resguardan de la intemperie encima de la estructura de cuatro ruedas. Los Vovis calculan que en el Llano tienen localizados 4-5 coches dormitorios. La situación es la idónea para estos vagabundos, ya que pueden pasar la noche en un lugar poco transitado y muy cerca de la zona céntrica.

Pero una cosa es que el coche que ha dejado de tener uso sirva de vivienda improvisada a que se confundan las situaciones. Es lo que le sucedió a una algecireña, que dejó su vehículo más de una semana estacionado en el mismo lugar del Llano y cuando fue a recogerlo se encontró sin las ruedas traseras y con un cristal roto. Lo peor fue que los sillones delanteros estaban echados hacia atrás y se encontró con una manta y con papeles desperdigados. Alguien había dormido en su interior.

La zona cedida por la Autoridad Portuaria Bahía de Algeciras (APBA) al Ayuntamiento es un lugar donde se suelen registrar robos de piezas de coches, apenas sustracciones de automóviles completos. Los hay que han llegado y se han encontrado sin ninguno de las cuatro ruedas. No obstante, efectivos de la Policía Local y del Cuerpo Nacional de Policía realizan asiduas batidas tanto para inspeccionar los abandonos como para vigilar.

El número de coches detectados como abandonados en la ciudad aumentó en un 20,28 por ciento si se comparan los datos de 2007 con los del año anterior. El año pasado fueron 682 los vehículos detectados, mientras que en 2006 se registraron 567. Las cifras se disparan si se compara 2007 con 2005, en los que hubo 313.

Este incremento ha implicado que la grúa municipal haya efectuado más retiradas, cerca de un treinta por ciento más desde 2005 hasta 2007. El año pasado fueron 234 los vehículos retirados, uno menos se registró en 2006 y en 2005 fueron 181.

El despegue de los números coincide con el impulso que ha adquirido a través de la patrulla de Residuos Sólidos Urbanos de la Policía Local, integrada por dos funcionarios y coordinada por el subinspector Miguel López.

Los agentes detectaron 682 vehículos el año pasado, lo que significa que comprobaron que reunían el perfil de abandonados. 672 fueron los que se gestionaron, es decir, se iniciaron los trámites correspondientes para apartar el coche de la vía pública. Tras estas diligencias, 438 fueron los apartados por los propios propietarios y 234 por la grúa. De los 682 detectados, 596 fueron a través de la Policía Local y 86 por otros cuerpos de seguridad.

Supone un ligero incremento con respecto a 2006, en el que fueron detectados 567 y 555 fueron gestionados, de los cuales 322 fueron retirados por sus propietarios y 233 gracias a la grúa. Es en 2005 cuando se comprueba el salto experimentado en los últimos años. En aquellos doce meses fueron 313 los vehículos detectados y 304 los gestionados, de los cuales en 123 casos se hicieron cargo los propietarios y 181 fue a través de la grúa.

En estos momentos los agentes especializados de la Policía Local tienen 32 actas en proceso, lo que significa que son coches que están en trámites de ser retirados.

En primer lugar, los funcionarios advierten, previa denuncia o de oficio, los vehículos que pueden reunir el perfil de abandonados. Es el primer paso de los trámites. Se comprueba las condiciones legales del coche, si es sustraído, si tiene seguro... y se insta al propietario a que se haga cargo de él. Tiene de plazo un mes . En caso que no se haga responsable es retirado por la grúa al depósito municipal. Allí ha de estar un periodo de dos meses y si nadie lo reclama pasa a convertirse en chatarra. Protección Ciudadana recuerda que existen empresas que se dedican gratuitamente a la retirada y su posterior catalogación como residuo.

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