Como complemento a las importantes obras de infraestructura que se estuvieron realizando en el puerto en la última década del siglo XX, se acometieron la construcción de diversas instalaciones que venían a completar las mejoras y los avances que, como puerto global y puerta de entrada y salida de la Unión Europea, se habían llevado a cabo en el ente portuario de Algeciras.

NUEVA ESTACIÓN MARÍTIMA

Una de estas obras que venía a responder a la necesidad de ampliar y mejorar las instalaciones que el gran incremento de pasajeros y vehículos había dejado obsoletas, se enmarcaron en el denominado proyecto de Nueva Terminal de Pasajeros. Segunda Fase. Se trataba de la construcción de una nueva Estación Marítima para pasajeros con un presupuesto total de 1.480 millones de pesetas y ocupando una superficie de 7.500 metros cuadrados. Las obras de esta segunda fase de la terminal estuvieron finalizadas en el año 2000 con la remodelación y la integración de las dependencias de la antigua estación marítima.

Al final, la nueva Estación Marítima consistió en un moderno y funcional edificio con 12.000 metros cuadrados útiles dividido en dos plantas. En la planta inferior se localizaron las oficinas de venta de billetes y de las navieras, locales comerciales, aduana, Guardia Civil y salas de desembarque. En la planta superior se hallaban la cafetería y salas de espera y controles de embarque. Desde la segunda planta, el edificio estaría conectado con los nueve atraques de los transbordadores por medio de andenes elevados cubiertos.

La antigua estación quedó reconvertida en un edificio auxiliar de 7.000 metros cuadrados en el que se instalaron oficinas y establecimientos comerciales.

EDIFICIO PARA ESTACIONAMIENTO

Desde finales de los años setenta se constataba la necesidad de construir un espacio cubierto y vigilado dedicado a aparcamiento de vehículos cerca de la Estación Marítima. Así lo demandaban los viajeros que, cruzando el Estrecho para unos pocos días, carecían de un lugar adecuado donde dejar estacionados sus automóviles.

Con la finalidad de dotar a la Estación Marítima de un lugar de aparcamientos cubiertos, en el año 1982 se puso en ejecución el proyecto de construcción de un edificio, de 180 metros de longitud por 38 metros de anchura, para estacionamiento de vehículos en la parcela, colindante al flanco meridional del muelle de la Galera, al Oeste de la Estación Marítima, que contaría con 800 plazas para automóviles, con la finalidad, refiere la Memoria, principalmente de proporcionar aparcamiento a los pasajeros que visitan Ceuta y dejan sus automóviles en Algeciras. Este edificio que, una vez terminado, dispuso de tres plantas, de las cuales dos estaban cubiertas, supuso una inversión de 300 millones de pesetas. Las obras finalizaron en el año 1984.

Sede de la APBA y Torre de Control

La vieja sede de oficinas de la Junta de Obras del Puerto había quedado obsoleta, no sólo por la falta de espacio ante las exigencias de las nuevas funciones que el desarrollo portuario estaba generando, sino por su inadaptación a los modernos sistemas telemáticos y de comunicaciones. Por ese motivo, la Autoridad Portuaria decidió acometer los trabajos de construcción de una nueva sede que respondiera a los retos de modernización que la gestión portuaria demandaba. Sobre el antiguo edificio de Sanidad Exterior, ubicado en lado meridional de la Comandancia de Marina, se edificó la moderna sede de la Autoridad Portuaria de la Bahía de Algeciras, de planta rectangular con patio interior cubierto, que se inauguró en el año 1995.

En el año 1998 se puso en funcionamiento la Torre de Control del Tráfico Portuario (Centro Coordinador de Servicios), instalación que eran de enorme necesidad dado el incremento de los tráficos generados en las últimas décadas y que exigían un control muy exhaustivo de las entradas y salida de los buques. Se ubicó en una parcela situada en la zona ganada al mar donde estuvo la antigua playa del Chorruelo.

Sede de la APBA y Torre de Control

La zona del Saladillo, dedicada en el pasado de manera prioritaria a actividades relacionadas con varaderos y astilleros, fue testigo de una profunda remodelación desde los últimos años del siglo XX, transformándose en un espacio portuario dedicado a las actividades lúdico-deportivas (además de dársena para el nuevo varadero-astillero del Rodeo en la Isla Verde) y con el objetivo de que se convirtiera en un activo puerto deportivo similar a los existentes en otros lugares de la costa mediterránea andaluza.

En 1993 se redactó el Proyecto de dársena para embarcaciones menores en el Saladillo, con el que se puso las bases del futuro puerto, procediéndose al relleno de la parte sur de la dársena entre los años 1995 y 1998. En ese último año se inició la urbanización de la superficie ganada al mar; en 1999 se instalaron los pantalanes para embarcaciones deportivas en la zona norte de la dársena, que vinieron a unirse a los existentes en la parte meridional de la rada. Estos atraques estuvieron terminados en el año siguiente, cuando se redactó el Proyecto básico de ejecución de nueva sede social del Real Club Náutico que iría ubicado en la parte nordeste de este puerto deportivo. El Club se trasladó desde su antigua sede, que como ya se ha indicado estaba situada junto a la dársena de embarcaciones menores, en el arranque de la carretera de la Isla Verde, a su nueva ubicación del Saladillo en el mes de septiembre del año 2002. El puerto deportivo del Saladillo, una vez concluido, pudo disponer de 800 atraques dotados con los más modernos sistemas de apoyo y servicio a las embarcaciones de pesca, veleros y yates. Sin embargo, diversos problemas derivados de algunos vertidos de aguas residuales aportados por el arroyo del Saladillo están retrasando la explotación completa como Puerto Deportivo de tan importantes instalaciones portuarias.