Algeciras, hace más de 700 años. Los Banu Marin, es decir, el imperio meriní, se despliega en el norte de Marruecos. El reino nazarí de Granada reclama su ayuda ante el avance castellano. El sultanato bereber salta el Estrecho y crea la única ciudad que fundó en la península ibérica, al-Bunayya. Al-Bunayya es Algeciras y está en Huerta del Carmen, entre el hotel Reina Cristina y la urbanización Marina del Carmen.

En concreto lo que hay en esta zona del término municipal es la muralla defensiva sur de aquella ciudad meriní. Un conjunto de restos en el que está trabajando el Ayuntamiento para hacer, esa es la intención, un parque arqueológico. La primera fase de sondeos termina esta semana y el Consistorio informó ayer de que los trabajos efectivamente ratifican que el sistema defensivo, esas torres casi derruidas que asoman, entre otros elementos, son de aquella época, de finales del siglo XIII.

El Consistorio prepara un proyecto de puesta en valor para hacer un parque arqueológico

Pero además hay novedades. No solo se ha constatado el origen meriní de la fortificación, sino que también se ha confirmado que hay una aportación constructiva posterior, de etapa nazarí, una reparación efectuada en aquel periodo, el siglo XIV.

Parte de la historia de Algeciras, en resumen, ha aflorado en las labores que se han realizado en los últimos dos meses, a cargo del arqueólogo municipal, Rafael Jiménez Camino; un arqueólogo alumno de la Universidad de Cádiz y dos peones de los planes de empleo.

Los estudios también indican que en ese área igualmente hay vestigios romanos, restos correspondientes al barrio industrial de la colonia de Roma Iulia Traducta (siglo I a.C-VII d. C.). En este caso la excavación no ha profundizado tanto.

Ha sido un sondeo de 5x4 metros en la barbacana exterior de la ciudad, bajándose hasta 1,8 metros pero sin haberse llegado a la cimentación ni a los referidos niveles romanos, que se encuentran debajo.

Al inicio del otoño está previsto que arranque una intervención arqueológica más ambiciosa en la zona, con tres arqueólogos y diez trabajadores también de los planes de empleo. Esa próxima fase sí abarcará más extensión (por ejemplo ya entrarán las torres), durará seis meses y será la definitiva para preparar el proyecto de puesta en valor, que ya tiene una versión previa.

Pilar Pintor, concejala de Cultura de Algeciras, explicó ayer que el Ayuntamiento ya está evaluando a qué vías de financiación podría acogerse para poner en pie el destacado proyecto. Una de ellas podría ser el 1,5% Cultural del Ministerio de Fomento. También se baraja pedir la ayuda de la Diputación y la Junta, para crear una alianza de colaboración como la que fructificó para actuar en las murallas medievales de Blas Infante.

"Algeciras ha tenido dormido su patrimonio y queremos recuperarlo. Será además un recurso turístico de primer orden. Ya tenemos el museo, las murallas medievales y, si logramos revalorizar el sistema defensivo sur, nos podremos sentir muy orgullosos", señala la delegada municipal.