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Algeciras se codea con la élite nacional durante tres temporadas

  • La ciudad disfruta del mejor balonmano del planeta desde 2005 a 2008 a pesar de los problemas económicos que acompañan al club nada más lograr el ascenso

El balonmano algecireño acaba de decir adiós a un ciclo en la élite. Tres temporadas en la Liga Asobal, la máxima competición nacional y para muchos la mejor del planeta. El sueño se ha esfumado, ya sólo es historia. Ahora el periodo comprendido entre 2005 y 2008 será recordado como la edad dorada del balonmano de Algeciras, y por extensión del Campo de Gibraltar. Una experiencia que se ha convertido en uno de los capítulos más laureados de la memoria del deporte de la comarca.

Muchos éxitos y sólo una gran decepción, la vivida el pasado 14 de mayo con la confirmación del descenso. Pocos equipos han dejado tanta huella en tan poco tiempo. El Algeciras BM debutó en la máxima categoría con una sorprendente victoria sobre el BM Ciudad Real, favorito al título. El segundo año en la Asobal el club algecireño tocó el cielo al alcanzar las semifinales de la Copa del Rey en su primera participación. La tercera campaña fue la del cambio radical. Los algecireños desafiaron a la lógica con una plantilla muy joven y lastrada por los problemas económicos.

Desafortunadamente el paso del Algeciras BM por la Asobal ha estado minado por la crisis económica casi desde el primer día. La falta de dinero tuvo a los albirrojos en primera plana nacional en más de una ocasión. La comunión entre vestuario y directiva se fue deteriorando hasta el punto de estallar en el curso 2006-07. El calvario se acentuó la pasada temporada y dejó en evidencia que la raíz del problema se viene alimentando desde el mismo verano en el que los algecireños adquirieron su plaza en la Asobal.

comienza el sueño

El 24 de abril de 2005 el Algeciras BM se hizo un hueco entre los más grandes. Fue el día de la consumación del ascenso a la Liga Asobal. Un abarrotado pabellón algecireño festejó el logro del equipo que comandaba Fran Ávila. El técnico chiclanero cristalizó en obra maestra el proyecto que el empresario José María Fernández le había puesto a su servicio. Ávila engrasó una de las plantillas más lujosas que se recuerdan en la División de Honor B. Convirtió la temporada 2004-05 en un triunfo aplastante. El equipo llegó a ser apodado Los galácticos. No en vano la nómina de jugadores –con Jovanovic, Beuchler, García Vega, Torrego, Bermejo, Dominikovic, el algecireño José Carlos Camacho, … –era muy superior al resto.

Una vez logrado el ascenso, la directiva de José María Fernández dimitió. El empresario desechó liderar el proyecto Asobal porque consideró que el Ayuntamiento y las instituciones no ofrecían todo el respaldo económico que él demandaba para hacer un bloque competitivo. Fue el verano más movido de los últimos años. Algeciras estuvo a horas de quedarse sin Asobal, pero la actuación de un grupo de jugadores fue decisiva. Junto a Camacho convencieron a José Ríos Corbacho para que se hiciese cargo de la presidencia y el club salió adelante. Parece que fue ayer cuando el portero Armand Torrego llevó in extremis la documentación Asobal a Barcelona, tras coger un avión en Málaga ayudado por un motociclista en pleno atasco. Rocambolesco, así fue el inicio de la aventura de los algecireños.

El Algeciras BM saltó la banca en su primer partido como local en la máxima categoría. Ningún aficionado olvidará septiembre de 2005. Los de Ávila tumbaron al campeonísimo Ciudad Real y terminaron la Liga en una dignísima novena posición. Ese campaña los albirrojos pusieron la guinda con el bicampeonato de Andalucía.

el máximo logro

El ejercicio 2006-07, en su segundo año Asobal, el Algeciras logró clasificarse para la Copa del Rey por primera vez. El conjunto dirigido por Pero Milosevic eliminó al poderoso Portland San Antonio el 7 de marzo de 2007 y alcanzó las semifinales. Fue el bombazo del torneo celebrado en Altea, donde el Ademar León cortó el sueño de los algecireños.

A los albirrojos les llovieron los galardones esa temporada, siendo proclamado mejor club de Cádiz de 2007.

La recién concluida andadura ha sido una firme apuesta por la juventud. Llegó Ricard Franch, un técnico de cantera, que se rodeó de jóvenes para intentar la permanencia con el menor presupuesto de largo de la categoría. El equipo resistió hasta la última jornada en la que descendió a pesar de vencer al Ciudad Real, reciente campeón de Europa.

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